Hace algunos meses viajamos a Nueva York para presenciar el destape del nuevo miembro de la familia X que hará su arribo a Estados Unidos a finales de este año. Ahora nos trasladamos a Alemania para manejar el X1. Si bien es un estreno en el país, la primera generación del baby X, del cual se han vendido 275,000 unidades, atraviesa su medio ciclo de vida. Aprovechando el facelift al que fue sometido se decidió su incursión en el mercado estadounidense.
¿Cómo definir este BMW X1? Es un vehículo que sabe mezclar los atributos de espacio de un SUV o SAV, como lo cataloga BMW, con las características de desempeño de un sedán. Solo que a diferencia de sus hermanos X3 y X5, que se perciben como auténticos utilitarios, este X1 se conduce más como un Serie 3. Todo radica en su estrecha distancia entre ejes y en que posee un centro de gravedad más bajo que un X3, por ejemplo. Pero aun así, si se requiere salir del asfalto, X1 cuenta con los atributos suficientes para circular por caminos cubiertos de tierra y piedras. Hablando de las dimensiones, BMW X1 mide 4,477 mm de largo, 1,798 mm de ancho y 1,545 mm de alto. Esto quiere decir que es 147mm más corto que el Serie 3 y 116mm más bajo que el X3.
BMW X1 llega como una novedad a Estados Unidos, pero en otros países hizo su aparición hace un par de años y ahora se muestra rejuvenecido tanto por fuera como por dentro. Además X1 2013 es más eficiente comparado con el modelo que reemplaza y que vio la luz en 2010. Disponible al público en el otoño próximo, X1 estará a la venta en tres versiones; sDrive28i, xDrive28i y xDrive35i. De serie equipan el cada vez más recurrido dispositivo Start/Stop y el sistema ECO PRO. Otra de las novedades es la aparición de BMW Lines. Dependiendo de tus gustos y personalidad puedes elegir la decoración interior y exterior de X1. BMW xLine, Sport Line y más adelante estará disponible un paquete M Sport.
Todos y cada uno de sus ángulos nos dicen que es un BMW con sello X. Pero engaña a la vista. Su tamaño compacto lo hace parecer mayor, y al usar molduras en color negro el vehículo aparenta ser más grande lo que en realidad es. Más que crossover, SUV o SAV _como lo define BMW_ lo catalogaría como un sedán deportivo con ambiciones de sedán.
Tras contemplar la fisonomía del X1, llegó el momento de poner manos a la obra. Materiales de alta calidad, trazos bien definidos, espacios para almacenar objetos y un amplio espacio de carga saltan a la vista antes de encender motores. Hay que destacar que por la baja altura, la posición de manejo es más atractiva que en el X3 o el X5.
Una vez más no nos deja de sorprender el poder que emana el motor twin-turbo de cuatro cilindros. Apuesto a que si quitáramos los emblemas que indican que es un Drive28i y comienzas a conducirlo no te parecería que conduces un motor de 2.0 litros. Y es que 260 lb-pie empujan de maravilla al X1. Desde muy temprana hora todo el torque fabricado en el twin-turbo labora a su máxima capacidad. Por arriba de los seis segundos marcados en el cronómetro el generador realiza todo lo posible para que logre las 62 mph (100 km/h). Es un vehículo bien balanceado; como mencionamos antes, sus dimensiones hacen que se mueva de manera ágil y estable.
Pero conociendo a los entusiastas de poder, BMW tiene en lo más alto al xDrive35i. Ideal para aquellos que consideran poca cosa los 240 caballos de fuerza del cuatro cilindros. Es un hecho que esta última opción será la más vendida. La misma receta del seis cilindros, solo que elevada a la sexta potencia. Seis cilindros fabrican 300 caballos de fuerza y 300 lb-pie de torque. Al combinar estas cifras obtenemos un manejo fuerte y dinámico. Sensación conocida y comprobada en el Serie 3 o X3, entre otros modelos más que utilizan el mismo corazón. Es como un imán. Se desliza suave y estable sobre las curvas. Sesenta caballos de fuerza hacen la diferencia. Comparado con el 2.0 litros, el seis cilindros en línea es un segundo más rápido al realizar el despegue de 0 a 62 mph.
BMW X1 tiene todos los atributos suficientes para destacarse de manera clara en el mercado. Ahora solo falta ver la aceptación del público, ya que oscila entre un SUV, un sedán, un hatchback y un crossover. Muchas personalidades en un mismo paquete.
