Dicen que lo bueno cuesta. Y un claro ejemplo de ello es el Audi R8 GT Spyder con un precio de 210,000 dólares. Dos palabras definen este convertible alemán: exclusivo y endiosado. Y decimos exclusivo porque solamente se fabricaron 333 unidades de este autentico súper deportivo, de las cuales una sexta parte, 50 para ser exactos, son destinadas a Estados Unidos, principalmente en la costa oeste del país.
Diferencias con un R8 “normal”, si se le puede llamar así, son bastantes. En principio no hay necesidad de entrar al auto para observar la Alcantará que cubre varias secciones del GT. Como símbolo de que no se trata de cualquier vehículo el Alcantará cubre tanto asientos, como volante, freno de mano y los pilares. Será tu decisión si optas por costuras en gris o rojo. Vaya dilema.
Uno de los objetivos principales en la fabricación del R8 GT Coupé y Spyder fue mejorar la relación peso-potencia. Es por eso que se utilizaron materiales ultraligeros como magnesio y fibra de carbón reforzada con polímeros para que al momento de llegar a la báscula obtuviera una merma de 187 libras (85 kilogramos) si lo comparamos con un R8 sin las iniciales GT. Varias de las partes que ayudaron en la dieta de este Audi también mejoran la aerodinámica del vehículo manteniéndolo adherido al asfalto, ganado así más estabilidad. Recordemos que la perdida de peso, combinado con 560 caballos de potencia ofrece una mejor dinámica. También hubo que meter mano en el sistema de suspensión y los amortiguadores fueron modificados para tener un menor recorrido, haciendo más rígido el trabajo, lo cual inmediatamente se nota en una mayor agilidad principalmente si conducimos es una carretera con curvas pronunciadas. Al sumar todo lo anterior con los sistemas electrónicos y la afamada tracción quattro el R8 GT regala una conducción con una firmeza absoluta. Habrá que ser demasiado bruscos con el pie y manos para vencer a la gravedad.
Detener un vehículo con un motor V10 no es tarea fácil. Por eso se recurrió a unos frenos de disco ventilados en las cuatro ruedas para detener los más de 550 caballos de fuerza de manera enérgica cuando así se requiera. Como mencionábamos unos renglones arriba, a la versión GT del R8 le fue instalada una serie de aditamentos para lograr un mejor downforce. Viste alerones adelante y atrás, spoiler y difusor, todos de fibra de carbón. Como remate, rines de 19 pulgadas realzan el carácter de este deportivo germano.
Al empalmar ligereza, aerodinámica y 560 caballos de fuerza, despierta una sonrisa al poner el pie en el acelerador. Testigo de ello es el cronómetro; en menos de 4 segundos nuestra mirada observa cómo la aguja llega a las 60 mph (100 km/h). Te ahorramos la tarea de ir al fin del velocímetro; la máxima velocidad es de 197 mph (315 km/h). ¿Con cuál de los R8 GT te quedas? ¿Coupé o Spyder?
