Por un lado tenemos un perfeccionado Lamborghini Gallardo con la descomunal potencia de 1,500 caballos de fuerza, mientras que en la otra esquina está un modificado Nissan GT-R con soberbios 1,200 caballos fuerza. ¿Quién crees qué gane?
Por un lado tenemos un perfeccionado Lamborghini Gallardo con la descomunal potencia de 1,500 caballos de fuerza, mientras que en la otra esquina está un modificado Nissan GT-R con soberbios 1,200 caballos fuerza. ¿Quién crees qué gane?