Anchorage, AK.- Porsche ha complementado la línea de Cayenne con la versión Diésel. Recordemos que existen las variantes V6 a gasolina, GTS, Turbo, S y S Hybrid.
De todos los Porsche Cayenne, esta recién ingresada variante Diésel es la que cuenta con la menor potencia al contener solo 240 caballos de fuerza. Con respecto al Cayenne V6 se queda a 60 caballos de fuerza y qué decir del Turbo con 500. Pero no por ser la última en cifras de poder significa que en lo demás esté a la zaga. Para ser sincero, si me dieran a elegir un Cayenne escogería la versión Diésel. Son varios factores los que me inclinan a tal elección, entre ellos la relación costo-beneficio. Al momento de poner en el pie en el acelerador sientes toda la arrogancia que ofrece su motor de seis cilindros. Jamás se comparará con la versión Turbo que acelera de 0 de 62 mph (100 km/h) solo 4.5 segundos, pero el 3.0 litros deja un grato sabor en la boca.
Basta comparar las cifras de par motor para saber de qué estamos hablando. Mientras Cayenne GTS con un motor V8 y 420 caballos de fuerza entrega 380 lb-pie, Cayenne Diésel lo supera con 26 lb-pie, solo que con dos cilindros menos. Debido a las capacidades de los motores turbo diésel no es necesario llegar a un régimen alto de revoluciones para alcanzar su clímax. En este caso solo hay que esperar a que la aguja del tacómetro marque 1,750 rpm para tener a nuestra disposición sus 406 lb-pie de torque.
Otra muestra del carácter de Cayenne Diésel no la demostró el cronómetro. Le bastan solo 7.2 segundos despegar de 0 a 62 mph (100 km/h). Es importante mencionar que detiene el crono en el mismo tiempo que el V6 a gasolina, solo que este último alberga más caballaje. Esta es una prueba más de que lo que vale es el torque y no los caballos de fuerza.
Así como se destaca por su interesante fuerza, Porsche Cayenne Diésel tiene un excelente rendimiento de combustible. Tendrán que pasar 750 millas para que el medidor del tanque pase de Full a Empty. Si tomamos en cuenta el volumen y capacidades del vehículo esta cifra llama la atención. Al rodar en carretera puedes alcanzar hasta 29 mpg, mientras que al conducir en ciudad la cifra se ubica en 20 mpg. En promedio sus 23 mpg se quedan muy distantes de 18 mpg que entrega el Cayenne V6.
Lograr este rendimiento no solo es trabajo del motor turbo diésel de seis cilindros; de la mano está el cada vez más socorrido sistema Start/Stop y una eficiente transmisión Tiptronic S. No tiene la misma gracia que una DSG pero ocho velocidades son suficientes para desglosar de manera decidida el poder de este Cayenne.
Al igual que las demás versiones de Cayenne, la diésel no es la excepción al contar con sistema All-Wheel-Drive y el Porsche Traction Management que asegura en cualquier circunstancia de manejo la distribución adecuada de la tracción; de esta manera se obtiene una excelente progresión, tanto en largas rectas como en curvas cerradas.
En el interior se disfruta el mismo ambiente deportivo que en los demás modelos Porsche. No se extraña para nada, pareciera que viajas en un 911, claro que guardando las proporciones. Respecto al Cayenne 2012 existen algunos ajustes. Ahora la apertura y cierre de puertas se puede hacer desde el centro de la cabina, además de que presenta un reloj analógico en la consola central.
En resumen, Porsche Cayenne Diésel ofrece cifras de un vehículo V8 y cuatro cilindros; por un lado entrega la fuerza de motor más grande pero por el otro el consumo de combustible es equiparable al de un vehículo más pequeño.