Con el regreso del 5.0, el Ford Mustang se corona de nuevo como el rey del segmento que fundó hace unos 45 años, el de los muscle cars. La escena contemporánea parece un viaje feliz en la máquina del tiempo a 1970, cuando el mercado automotriz norteamericano, en tanto que liza de un nicho en particular, tenía corriendo en óvalo a tres pony cars, el Ford Mustang, el Chevrolet Camaro y el Dodge Challeng. Con el regreso de los dos últimos después de una ausencia, la parrilla se calienta otra vez, mientras recuerda que el Mustang es el único que ha estado por décadas ahí, ininterrumpidamente.
Entre el martes 23 y miércoles 24 de marzo del 2010 acudimos a al evento nacional del nuevo Ford Mustang 2011, en Los Angeles, California, con la emoción del reencuentro con el célebre motor de 5.0 litros, descontinuado desde 1995, y que debutara en 1979. Podríamos decir que se trató exclusivamente del lanzamiento del Mustang 5.0, pero también conocimos la versión de 3.7 litros. El eventono perdió un minuto en ociocidades. Tras abandonar el avión en LAX fuimos llevados a un studio de diseño en Los Angeles a unos 15 minutos del aeropuerto donde tuvimos el primer contacto con el auto y un breefing técnico, y desde ahí partimos en ruta (alrededor de 80 millas en dos etapas) por las bellísimas carreteras hacia el norte de LA, incluida la espectacularmente bella SR-1/Pacific Coast Highway hacia Port Port Hueneme, donde realizamos algunos ejercicios de prueba. De ahí salimos hacia el hotel.
Este primera jornada fue a bordo del Mustang V-6 de 3.7 litros. Al otro día, desde el hotel y conduciendo por una ruta igualmente hermosa e ideal para revelar las virtudes del auto probamos el 5.0 camino al aeropuerto ejecutivo de Camarillo, donde se nos ofreció la posiblidad de hacer draggin’ comparativo con el Camaro. Aunque su frente ha sido ligeramente modificado más que por belleza por funcionalidad, en realidad los cambios cosméticos del carro no son tan dramáticos si comparados con lo que trae ahora de ingeniería motriz. El Mustang 2011 ostenta “mejoras en todo sin comprometer nada”, cual lapidariamente nos dijera en su miniconferencia el ingeniero jefe Dave Pericak.
El flamante Mustang es rápido, divertido, asequible y eficiente. Estrena por primera vez frenos Brembo, y también el color amarillo. Ése es el modelo especial de alto performance Boss 302R. El V-6 es un motor DOHC Duratec® nuevo, totalmente de aluminio y por tanto más ligero, de 3.7 litros que genera 305hp y 280 Lb x pie de torsión. Es una coz de 11 caballos más sobre el Camaro comparable y además hace 31mpg en la autopista, todo un récord para la historia del automóvil con tal combinación de números: es la primera vez que se logran más de 300hp con más de 30mpg. Las cifras específicas de eficiencia son 19mpg en la ciudad y 31 en la autopista con transmisión automática, una mejora del 30% respecto del modelo 2010 que hacía 16 y 24, al tiempo que el potro automático ahora reporta 19 y 29, en contraste con las 18 y 26 del equino del año pasado.
La transmisión de 6 velocidades, tanto automeatica como manual, es responsable en gran parte de estos índices de economía de combustible. En mi marcha del primer día a bordo del V-6, me encontré con una auto atractivo en estilo y modales, agradable de conducir, cuyo motor tira bien y al mandato de ciertos pisotones al acelerador en las tortuosas carreteras de la zona, sazonadas con colinas, reveló potencia, aunque a veces la 6 velocidad se sentía fofa. Durante largos períodos anduve en 4ta., que era la mejor manera de sentir el empuje del motor y su canción. El nuevo Mustang tiene dirección eléctrica, que se portó muy bien en las curvas. La suspensión es adecuada, pero no tan comunicativa como la de los deportivos europeos.
En el interior se observan mejores plásticos y los relojes han sido rediseñados. Ahora se alejan bastante de la reinterpretación retro original, pero conservando los números condensados, de moda en los carros americanos hace casi 50 años. En un paquete supremo, se puede elegir el color de la luz. En cuanto a electrónica, sostiene el sistema SYNC® que justamente permite SINCronizar toda la parafernalia de comunicación y entretenimiento portátil del tercer milenio por medio de efectivos códigos vocales. E incluye GPS y el maravilloso sistema Travelink, que informa al conductor del estado del tiempo, las gasolineras cercanas y hasta el precio del galón. Al final del primer día terminamos haciendo slalom en una explanada habilitada al efecto. Allí se revelaron mejor las capacidades del Mustang sobre el Camaro en prueba nariz a nariz.
En la mañana del miércoles 24 le tocó la probada al 5.0 por las deliciosas carreteras de la región hasta el Camarillo Airport, donde al pie de un veterano Lockheed Super G Constellation versión militar pudimos hacer un drag test al caballo de estreno. Todos los que hicimos la prueba obtuvimos mejores resultados a bordo del Mustang. El nuevo Ford Mustang GT del 2011 revive la exitosa cilindrada de 5.0 litros, cuya producción cesara hace 15 años. Mas la coincidencia de siluetas entre aquella planta y la de ahora es sólo de litraje. El Viejo 5.0 generaba 240hp y 285 lb. x pie de torque, números que han quedado muy detrás con los 412 caballos y las 390 libras de este nuevo V-8. todo de aluminio con 4 válvulas por cilindro y que además, es capaz del prodigioso rendimiento de 26mpg en la carretera. Las cifras de consumo de gasolina son las siguientes: 18mpg en la ciudad y 25 en la carretera en caja automática, y 17/26 en manual. Esta planta acopla lo mismo a transmisión automática que manual, ambas de 6 velocidades.
Es una verdad de Perogrullo que existe una diferencia de performance entre el V-6 y el V-8… No por gusto Ford ha sido capaz de parir este nuevo caballo. Casi 9 millones de Mustangs han sido producidos en cuatro décadas y media. La competencia es buena y un panorama de circunstancias desfavorables, mejor aún. Sin meternos a filosofar, la verdad es que sin retos nada pasa. El regreso del Camaro como el Hijo Pródigo en GM y la necesidad de motores más eficientes sin disminuir su poder ante la perspectiva de un próximo aumento de los precios del crudo, empujaron a Ford —que en los últimos años reinó en solitario en el segmento de los musculares—, a ponerse la pilas y he aquí esta bandeja con un Mustang V-6 de más de 300 caballos y un V-8 5.0 que se comporta como su ya histórico 5.4, pero con más economía. Y todo esto sin dejar fuera un precio tentador: el base del Mustang 2011 es de $22,995, inferior al más bajo del Camaro. Qué bueno que el potro americano cabalga con nuevo brío enardecido por el desafío…