Sin experimentar un cambio estético tan radical como ocurrió con su principal rival el Ford Escape, Honda CR-V llega a su cuarta generación para seguir siendo uno de los SUV preferidos del público. Fue en 1995 cuando nació en Japón el CR-V, un modelo de dimensiones pequeñas dispuesto a ofrecer las cualidades de un sedán pero con vestimenta de utilitario. Un par de años después la camioneta nipona pisó por primera vez tierras americanas. Posteriormente, en 2002 vimos la segunda generación y en 2007 vimos el antecesor del cual hablaremos a continuación.
Desde hace unos meses Honda dio a conocer el concepto del cual surgiría el modelo 2012. Honda CR-V (Comfortable Runabout Vehicle), además de relucir una imagen más moderna, recibe mejoras en su corazón para obtener algunos caballos de fuerza extra y de igual modo disminuir el consumo de gasolina. Estéticamente la camioneta sigue la misma receta de diseño que le ha hecho valer tanto éxito en el mercado.
Dentro de la lista de ingredientes que conforman el CR-V está el mismo motor de cuatro cilindros de 2.4 litros. Solo que en esta ocasión los ingenieros de la marca japonesa hicieron algunos ajustes en el bloque para exprimirle 10 caballos de fuerza. Ahora un total de 185 caballos de fuerza son los que hacen mover al vehículo. Esta modificación también hizo que la capacidad de torque subiera ligeramente, y ahora es de 163 lb-pie. Como jefe máximo del poder del SUV, continúa la caja automática de cinco velocidades. Aun con el caballaje extra el consumo promedio de combustible descendió a 26 mpg para la versión con tracción delantera y 25 mpg para el CR-V All-Wheel-Drive. Otra de las novedades es el sistema Eco-Assit. Tiene como función avisar al conductor, en el cuadro de instrumentos, en qué momento está realizando una conducción eficiente.
Llegó el momento de poner todas estas cifras en acción. Para empezar, la sensación de manejo es más suave; se podría decir que la calidad de marcha se compara a la de un sedán a pesar de tener una altura superior a la de un Civic o un Accord. Todo se origina a partir de recibir un bastidor más rígido, lo que impide un balance excesivo por parte del chasis. Un aspecto que también podemos subrayar es la insonorización de la cabina. Como opción para las tres versiones del vehículo puedes instalar el sistema AWD. Mejora la capacidad de tracción y gana en estabilidad al tener tracción en las cuatro ruedas. Mientras que la mayoría de las marcas ofrecen en sus modelos transmisiones con seis, siete y hasta ocho marchas, Honda se mantiene rezagado en este tema al contar con una caja de tan solo cinco cambios. Estamos seguros que el cuatro cilindros desahogaría mejor y el consumo de combustible bajaría además de ofrecer un manejo más atrevido ágil si tuviera una transmisión con un mayor número de relaciones. Si deseas remolcar, el CR-V 2012 tiene atributos para hacerlo, siempre y cuando no excedas las 1,500 lbs (680 Kg) de peso.
Para mantenerse a la vanguardia, Honda actualizó los sistemas de comunicación e información. Lo que hasta el modelo 2011 del CR-V era una opción al momento de comprar el modelo, ahora viene como equipamiento de serie. De esta manera ya no tendrás que pagar dinero extra para que instalen el Bluetooth en tu SUV. Además, está dotada de un lector de mensajes de texto de tu teléfono celular. Todo el diseño del tablero recibe una nueva vista, dando un ambiente de mayor habitabilidad. A la par la zona de carga es más baja para facilitar la tarea de poner y sacar el equipaje.
Desde la versión base llamada LX está la pantalla i-MID en el centro del tablero, cámara de reversa, aire acondicionado, rines de 16 pulgadas, dirección asistida eléctricamente y sistema de sonido con cuatro altavoces. Un nivel más arriba, EX, aumenta el número de bocinas, instala techo corredizo, rines de 17 y asiento de posición eléctrica para el conductor. En la cúspide de las versiones está la EX-L, y suma a lo anterior un sistema de audio de 360 vatios, siete altavoces, navegador, asientos de cuero y aire acondicionado bizonal.
A simple vista es innegable que se trata de un Honda CR-V, solo que ahora despliega rasgos más dinámicos. Los cambios notables los vemos en la nueva parrilla estilizada. Mostrando más aerodinamismo la parte trasera tiene una caída de techo más marcada. Al observas los grupos ópticos posteriores nos evoca el Volvo XC60.
Por último, aunque no menos importante, está la seguridad del Honda CR-V. Bolsas de aire frontales y laterales, control de estabilidad, frenos de disco en las cuatro ruedas con ABS, son los puntos a resaltar en el utilitario de tamaño pequeño. Sin dudas, este SUV con todas sus actualizaciones continuará siendo uno de los modelos consentidos del público.