Dicen que las primeras impresiones cuentan. Por eso, cada vez que subo por primera vez a un auto trato de describirlo con entre una y tres palabras. Es una especie de tradición. Con el Mercedes-Benz SLK 350 de 2012, la primera palabra que asaltó mi cerebro lo hizo apenas al verlo: Sexy. Imagino que su color, Rojo Marte _así se llama_, tuvo algo que ver… La segunda palabra apareció apenas me introduje en la cabina: Lujoso. Y la tercera, después de manejarlo por una cuadra: Liviano. Bien podría agregar que a estas tres, se suma una sensación: Alegría en el manejo diario.
Con espacio para dos pasajeros este convertible en versión 2012 es aún más lujoso que sus predecesores, cuenta con mayor número de funciones o productos estándar que antes eran opcionales y suma ingredientes de confort a una experiencia de por sí placentera. A eso podemos _y debemos_ añadir un motor más eficiente y un diseño que cautiva por la atención al detalle.
Con un motor V6 de 3.5 litros con inyección directa, ofrece 302 caballos de fuerza a 6.500 rpm y 273 lb-pie a 3.500 rpm. Este pequeño prodigio de la industria automotriz, con una suspensión que brinda viajes cómodos y sin sobresaltos, acelera de 0-62 mph (100 km/h) en 5.4 segundos. Supongo que si debe uno encontrarle una desventaja es que el tope de velocidad es de 155 millas por hora, electrónicamente controlado. De acuerdo a datos de la EPA, el consumo ronda las 30 mpg (12.7 km/l).
La transmisión es automática, de siete velocidades, con paletas de magnesio tras el volante que ofrecen la opción de un manejo más deportivo. El conjunto puede combinarse con diversos modos de manejo: eficiente, deportivo y manual, y en cualquiera de ellos al apretar el acelerador se combinan la potencia, la respuesta y la suavidad.
Visto de frente el SLK 350 de 2012 impresiona por su parrilla inspirada en el Mercedes-Benz SLS AMG que le da un rostro más agresivo, aunque siempre dentro de lo deportivo. Y si eres de los que por primera vez se enamoraron de un SLK 350 por su techo duro retráctil, no te preocupes: sigue ahí… mejorado.
En el caso del vehículo que probamos se combinaban opciones estándar y las del paquete llamado Premium que incorpora interfaz para iPod/Mp3, sistema de calefacción a nivel del cuello, radio satelital, sistema de sonido Harman-Kardon y sistema de control remoto para el techo. También ofrece en forma opcional, el paquete multimedios con pantalla de 7 siete pulgadas, LCD, de alta resolución, que permite ver mapas en 3D; un sistema mejorado de comando por control de voz; 10GB para almacenar música, CD para 6 discos y sistema de navegación en tráfico y clima, provisto por Sirius.
Estándar, podemos mencionar la conexión Bluetooh para telefonía de manos libres, palanca de cambios forrada en cuero _al igual que el volante con ajuste en tres posiciones_, zona de control de clima, control electrónico de velocidad de crucero, sistema para apertura de garaje, limpiaparabrisas que funcionan mediante sensores que detectan lluvia, tres memorias para las posiciones de los asientos y ocho ajustes posibles incluso cuatro para el área lumbar.
En la cabina el diseño es puro, clásico, sin ostentaciones innecesarias, con materiales y manufactura de primera calidad. No es quizás el más espacioso de los vehículos en su segmento, pero en mi caso eso fue compensado por el hecho de que aun con el techo plegado, en el maletero quedaba un espacio decente _6.4 pies cúbicos_, algo que no ocurre en otros modelos similares.
Es un auto que está listo para adaptarse a distintos climas y circunstancias. Si conduces en un área fresca _digamos, con clima otoñal_ el sistema de aire tibio ubicado a la altura del cuello te reconfortará cuando conduzcas con el techo abierto. Si manejas en un clima más bien frío, los asientos tienen calefacción, y si tu viaje es por tierras cálidas, el cuero de los asientos cuenta con tecnología sun-reflective que ayudará a contrarrestar la potencia de los rayos solares.
Más aun, al inicio mencioné que ese techo retráctil que nos conquistó hace unos años ha venido mejorado… El SLK 350 2012 ofrece un techo mágico (Magic Sky Control Roof) que viene a ser como los lentes fotocromáticos que permiten regular la intensidad del paso de la luz. Eso sí, a diferencia de los lentes con los que uno sale de la oscuridad al sol, en el caso de este techo “mágico” la decisión es del conductor y para variar la intensidad de la luz que se filtra dentro del vehículo, tan sólo hay que apretar un botón. Reconozco que me agradó que la decisión estuviese en mis manos y que no fuese automática porque siento que permite adaptar la oferta a mi necesidad, sin imposiciones, algo que se agradece.
Cuando el manejo es con el techo replegado, la cabina sigue siendo silenciosa gracias al sistema Aircap que ayuda a disminuir el ruido, cortesía de un deflector de viento. A esto se puede añadir, opcional, Airguide, que no es otra cosa que un par de paneles de plexiglás, ubicados tras los asientos, y cuya misión es servir también como deflectores de viento.
En materia de seguridad, los Mercedes-Benz tienen, estándar, frenos antibloqueo, sistemas de control de tracción y estabilidad, bolsas de aire _incluidas unas a nivel de las rodillas y las laterales_, barras antivuelco y el sistema conocido como Attention Assist que monitorea al conductor e identifica si no está atento a la carretera o si está adormecido.
Este vehículo también cuenta con un sistema de asistencia en carretera las 24 horas del día, cinturones de seguridad de tres puntos, alarma antirrobo con sistema para inmovilizar el motor, iluminación nocturna de seguridad, sistema de monitoreo de presión en los neumáticos y la opción “pánico” en la llave de acceso remoto.
El Mercedes-Benz SLK 350 compite en un segmento donde resaltan nombres con vida propia _como el Audi TT, el Porsche Boxster o el BMW Z4_ pero consigue su propio espacio con elegancia, prestaciones y calidad.