Este peculiar vehículo de Volkswagen se originó en 1934 gracias a un pedido especial de Adolf Hitler a Ferdinand Porsche para movilizar al pueblo alemán. Debido a la situación económica el líder NAZI necesitaba un auto económico, con bajo consumo de combustible y fácil de reparar.
En 1935 se desarrolló el primer prototipo realizado por Porsche con un motor bóxer de 700 cc y 22.5 caballos de fuerza. Para 1938 se presentó la serie 38 mientras se levantaban las bases de la primera planta de producción. Es en 1945, pasada la segunda guerra mundial, cuando se lanza al mercado alemán y cuatro años más tarde hace su arribo a Estados Unidos.
Después de siete décadas de existo y clásico de clásicos de Volkswagen llega a su fin en 2003 en Puebla, México. En total se vendieron un total de 21,529,464 unidades a lo largo de su historia.