El Test Drive Audi e-tron prototype en las salinas y sabanas de Namibia, permitió comprobar las impresionantes cualidades dinámicas del primer SUV 100% eléctrico de la marca alemana, que cuenta con la nueva generación de la tracción quattro.
Antes de su salida al mercado en su versión de producción final en 2019, los ingenieros de Audi pusieron a prueba la tracción quattro eléctrica, junto a la nueva suspensión, que se adapta a la perfección con el bajo centro de gravedad del vehículo impulsado por los motores eléctricos, con lo que ofrece una tracción óptima, dinámica de un deportivo y estabilidad impecable sobre cualquier terreno.
El lago salado en el desierto de Kalahari en Namibia, con su superficie dura y porosa, con fina grava, ofreció un bajo coeficiente de fricción y las condiciones ideales para poner a prueba el Audi e-tron prototype, practicando drifting (derrapajes controlados), y sentir su rápida aceleración y su gran capacidad de tracción.
Esto es posible, gracias a la nueva tracción quattro eléctrica y a los numerosos sistemas de suspensión interconectados de forma inteligente, especialmente el Control Electrónico de Estabilidad (ESC), el sistema de conducción dinámica Audi drive select y la suspensión neumática de serie.
El Audi e-tron prototype puede elevar la distancia libre al suelo en 50 mm, con solo pulsar un botón, lo que facilita el manejo sobre terrenos accidentados.
Al mismo tiempo, el ESC optimiza la tracción y el control de los frenos, y aumenta el efecto del bloqueo del diferencial electrónico para una transferencia de potencia y una propulsión óptimas para permitirle desplazarse sin esfuerzo, incluso sobre el arenoso suelo de la sabana africana.
Los dos motores eléctricos proporcionan la fuente de propulsión ideal para el ultrarrápido sistema quattro eléctrico de alta precisión y en el modo de manejo boost proporcionan hasta 300 kW (408 caballos de fuerza) 490 libras de torsión por pie lineal.
La efectiva gestión térmica juega un papel crucial en su funcionamiento y permite que el rendimiento se mantenga incluso cuando los componentes del tren de potencia se someten a cargas elevadas. El resultado: un excelente comportamiento dinámico y un gran placer de conducción en cualquier circunstancia.
Test Drive Audi e-tron prototype en las salinas y sabanas de Namibia
La tracción quattro eléctrica combina la eficiencia de la tracción en un solo eje con la dinámica y la motricidad de los sistemas de tracción total.
El sistema asegura la regulación continua y variable de la distribución ideal del par motor entre los dos ejes, y alcanza un nuevo nivel de versatilidad, dinámica y precisión.
Solo necesita unos 30 milisegundos desde que el sistema detecta las condiciones de marcha hasta que los motores eléctricos distribuyan la torsión, por lo que resulta mucho más rápida que la tecnología quattro convencional.
La razón es que, con la tracción total eléctrica, no es necesario un embrague mecánico, sino que simplemente se distribuye la electricidad.
Esto sucede en apenas una fracción de segundo. Por lo tanto, incluso con cambios súbitos en el coeficiente de rozamiento y situaciones extremas de marcha, la respuesta del sistema quattro queda completamente garantizada.
Otra de las clases del sistema de tracción eléctrica a las cuatro ruedas es el funcionamiento inteligente en red de los numerosos sistemas de control.
La unidad central de control de la suspensión integra por primera vez el controlador de la dinámica del sistema de tracción quattro y el control selectivo de par en las ruedas.
Si se detecta subviraje durante la conducción deportiva, interviene ligeramente en los frenos de las ruedas interiores a la curva, que están sometidas a menor carga, lo que dirige el par hacia el exterior.
El vehículo se inscribe así en la curva y sigue de forma precisa la trayectoria marcada desde el volante. Además, un innovador sistema de control de tracción proporciona una gran motricidad y estabilidad.
El deslizamiento de las ruedas se controla directamente en la unidad electrónica de potencia de los motores, de forma 50 veces más rápida y adaptándose con mayor precisión a las condiciones de marcha.
Para el conductor, esto resulta especialmente evidente en combinación con los cuatro modos de funcionamiento del Control Electrónico de Estabilidad (ESC).
Además del ESC, las características del Audi e-tron prototype también pueden adaptarse a distintos tipos de terreno, utilizando el sistema de conducción dinámica de serie.
Ya sea para mantener un crucero relajado, para conducir de forma dinámica en carreteras de curvas o para realizar excursiones fuera del asfalto, el conductor puede elegir entre siete perfiles en función de la situación de conducción, las condiciones de la carretera o los requerimientos personales.
Además de en el sistema de propulsión y la asistencia de la dirección, el Audi drive select también influye en el funcionamiento de la suspensión neumática adaptativa con control de amortiguación.
En carretera, la carrocería desciende hasta 26 mm, para mejorar la estabilidad y la aerodinámica. En manejo off-road, puede elevar la carrocería 50 mm.
La instalación de los componentes del tren motriz y de la batería de alto voltaje en una posición baja contribuye decisivamente a la sobresaliente dinámica transversal del SUV eléctrico.
El sistema de baterías, con la forma de un bloque ancho y plano, se ubica entre los dos ejes, por debajo del habitáculo. El centro de gravedad del Audi e-tron prototype está situado en una posición semejante a la de un sedán. En comparación con un SUV convencional, el modelo completamente eléctrico ofrece una rigidez torsional 45% superior, lo que establece las bases para un preciso manejo y un gran confort acústico.