No le digan adiós porque el Saab todavía está vivo. Aunque la casa matriz General Motors despidió 750 trabajadores en la fábrica de Saab en Trolhattan, Suecia, no parece enfriar el entusiasmo de un grupo de inversionistas suecos que al parecer demostraron significativo interés en comprar la automotriz de 62 años. Saab ha sido cortejada por seis a ocho compañías bien grandes, según oyeron nuestros incansables espías. La automotriz contrató al Deutsche Bank para buscar otros inversionistas. Recientemente Saab solicitó protección de sus acreedores, medida que según dijo le permitirá ser adquirida de manera rápida y eficiente por una fuente externa. GM anunció sus planes de deshacerse de Saab de un modo u otro para fines del 2009.