En las famosas salinas de Bonneville en Utah, el equipo de Hajek Motorsports impuso un récord de velocidad máxima con un Ford F-250 utilizando un motor diésel y un biodiésel. La pick-up con el nuevo motor turbo 6.7 litros V8 Power Stroke alcanzó una velocidad tope de 171.1 mph (275.567 km/h), rompiendo el récord anterior de 166.8 mph (268.519 km/h) registrado por un camión GMC con un generador Duramax. Hajek Motorsports también rompió la marca con un el motor biodiésel B20, al superar el récord anterior de 130.6 mph (210.202 km/h). El F-250 logró una velocidad de 183 mph (292.900 km/h). Sobre el motor Power Stroke Diesel, producido en la Planta de Motores de Chihuahua, sabemos que produce cifras por demás sorprendentes para un vehículo de su clase. En total son 400 caballos de fuerza y 800 lb-pie de torque. Este grandioso poder le otorga una soberbia capacidad de remolque y carga útil, además de una excelente economía de combustible.
No es la primera vez que Hajek Motorsports establece un récord de velocidad. En 2009 un Ford Mustang empleando E85 logró marcar en el velocímetro 255.764 mph (408.9 km/h). Un año después Bill Elliott, piloto de NASCAR, estableció un récord de velocidad en un circuito cerrado. Talladega Super Speedway fue testigo de cómo igualmente un Ford Mustang alimentado con E85 consiguió las 170 mph (272 km/h).