A simple vista, podría parecer que nada tienen en común un pequeño Chevrolet Aveo y un lujoso Chrysler 300, pero en realidad, si lo analizamos bien, encontraremos que los panfletos publicitarios de ambos destacan lo fácil que es conectar iPod en el sistema de entretenimiento de cualquiera de los dos. Es un reflejo de la importancia que tuvo el recientemente fallecido Steve Jobs, fundador de Apple, para cambiar la manera como todos concebimos el uso de ciertas tecnologías. En la medida en que los iPod de Apple convirtieron los CD en reliquias obsoletas, los fabricantes de autos dejaron de ofrecer, como equipo estándar, los tocadiscos compactos. Y eso en todos sus vehículos, no solamente en aquellos orientados hacia el segmento más joven del mercado. Al tiempo que los famosos iPod comenzaron a encontrarse por todas partes, los fabricantes de autos decidieron buscar la forma de integrar esos aparatos a los vehículos que producían. Doug Newcomb, Editor Senior de Tecnología para Edmunds.com, señaló recientemente en el blog InsideLine que la gente se viene dando cuenta también de que no necesita un costoso sistema de navegación por GPS instalado en su carro, si pueden aprovechar una aplicación gratuita en el iPhone que funciona perfectamente. Los fabricantes de autos en todo el mundo aprovecharon las tecnologías personales desarrolladas por Steve Jobs y las involucraron en el diseño de sus nuevos vehículos, especialmente en aquellos más amigables con el medio ambiente. Por ejemplo, Nissan ofrece una aplicación para el iPhone que permite a los usuarios revisar la carga y la vida de las baterías del auto eléctrico Leaf, y también monitorea sus hábitos de manejo con el fin de hacerles recomendaciones que podrían incrementar el rendimiento del vehículo.