Desde que Acura RDX cambió su motor turbo de cuatro cilindros por un V6, que es en gran medida lo opuesto de lo que el resto de la industria está haciendo, la reacción de los compradores ha sido positiva. Las cifras de ventas de Acura indican una ganancia del 142% sobre las cifras de un año atrás. Es cierto que no estamos hablando de grandes volúmenes, pero 2,664 unidades vendidas en comparación con 1,100 en julio es una buena diferencia, especialmente cuando las ventas de los sedanes TL y TSX bajaron ligeramente en el mismo período. Veremos si otras automotrices volverán a apelar al V6.