En su carrera por las ventas con Mercedes-Benz y Audi, BMW ha puesto más énfasis en la creación de modelos más compactos como el Serie 1. Además ha hecho todo lo posible para que la filosofía de deportividad no se pierda en este hatchback, si no al contrario aprovecha esa carrocería compacta para garantizar la diversión al volante.
Podemos definir en dos palabras a este BMW Serie 1: rápido y cómodo. Sobre el papel este modelo posee argumentos que lo hacen estar encima del Audi A3 o la Clase A de Mercedes-Benz, tal ves estos dos últimos son más novedosos que el BMW. Pero eso no importa para el Serie 1 a pesar de ser relativamente más longevo no demerita que su imagen luzca moderna.
Cuando la segunda generación del BMW Serie 1, lo primero que llamó la atención de este hatchback fue la postura atlética originada por sus rasgos marcados. Tal vez para muchos vean desproporcionado su perfil al ofrecer un cofre sumamente alargado y una parte trasera recortada. Sin embargo, este modelo lleva elementos más sutiles, y así ofrecer un equilibrio visual.
Toda esta imagen de agresividad se eleva aun más cuando se elige el paquete M Sport. Especialmente en el caso de la versión de tres puertas. Al acercarse al Serie 1 se nota a leguas que es un vehículo distinto. Te saluda con una fascia delantera optimizada y una parrilla en color negro. Atrás se distingue por el nuevo diseño de la fascia con acabado oscuro. Este sello característico de M continua en los costados del vehículo, ahí delata faldones laterales y los calipers en color azul que forman parte del sistema de frenos M Sport. También se encuentran rines de 17 pulgadas con un diseño especial.
Pero eso no es todo. Debido a que la suspensión es M, además de obtener una mayor firmeza por parte de los amortiguadores la altura del vehículo se ve reducida en 10 mm. Es importante mencionar que no es en realidad un auto de la gama M, pero es poco lo que le falta para hacerse acreedor a la condecoración.
Abres la puerta del vehículo y los estribos con el sello M te dan la bienvenida. En comparación con el Serie 1 normal, el Paquete M Sport viene con una serie de cambios que enaltecen la imagen deportiva del vehículo. Tenemos que comenzar por los asientos, y es que es lo primero que salta a la vista debido al estilo deportivo y la cubierta de Alcántara. A unos minutos de iniciada la conducción te das cuenta del gran soporte que ofrece al conductor y copiloto. Jamás sientes que te molesten, aun cuando la jornada de manejo sea larga. Otras decoraciones que integra el kit deportivo para el Serie 1 es el volante, el techo de antracita, acabados en aluminio y los perfiles en color azul.
A medida que el acelerador se acciona al fondo, los cuatro pistones hacen que te pegues al asiento de una manera suave. BMW Serie 1 hace valer la combinación que existe entre los 170 caballos de fuerza y el peso de kilógramos. Simplemente los asientos delanteros dicen sobre la maniobrabilidad del vehículo. Como lo mencionamos anteriormente en ningún momento cansan. No importa la talla del conductor, ya que cuenta con ajuste eléctrico en la anchura del respaldo.
Este Serie 118 porta un motor que si bien es de cuatro cilindros no te hace olvidar que estás en un BMW. Desde las 1,500 hasta las 4,500 rpm puedes obtener las 184 libras-pie de torque. Al combinar estas cifras con una caja manual de seis velocidades obtenemos un manejo enérgico, muy al estilo de los hot hatch. Aunque a estas alturas la transmisión automática es mucho más rápida y precisa al momento de hacer los cambios, por lo que el consumo de combustible es menor. Todo es cuestión de gustos. Si desea utilizar las configuraciones básicas del sistema de conducción -Eco Pro, Confort , Sport y Sport Plus- el manejo cambiará de actitud. Es de lo dócil y suave a lo salvaje en un mismo auto.
Claro, que el BMW 118 no es único en el mercado con sello hecho en Alemania. Pero el Be Eme tiene muchos atributos a considerar. De inicio está la posibilidad de poder utilizarlo día a día. Este “semi” M es una prueba de lo que en realidad puedes encontrar en uno real.