Corvette Stingray vs. BMW M3
Una de las reglas principales en cuando eres auto-entusiasta y te gusta la velocidad es no hagas tonterías en la vía pública, el conductor de este Corvette Stingray parece no saberlo.
Además de eso, si tampoco tienes la habilidad necesaria o el conocimiento necesario de tu nuevo auto, llévatelo a una pista donde puedas conocerlo y perder el control con menos posibilidades de hacerle daño a nada ni a nadie. Segunda regla que el conductor de este Corvette Stingray tampoco sabe.
Después de un buen quemón de clutch por no saber arrancar bien, y con tal de tratar de sorprender al piloto del BMW M3 - quien ni se inmuta -, el "as" detrás del volante del Chevrolet llega a un inevitable desenlace. Al menos tuvo un poco de suerte, y seguro terminó diciendo "es lo que quería hacer".
Claro que eso es lo que pasa cuando se tienen 460 hp y 465 lb/ft de torque procedentes de un V8 de 6.2 litros que van a las ruedas traseras y que el piloto no tiene ni la menor noción de cómo se controlan, al mismo tiempo que apaga cualquier tipo de asistencias al piloto con las que el Corvette cuenta para poder darle una "lección" al BMW.
La lección que si nos deja es no hagan esto en público y aprendan a manejar antes de hacer ridiculeses en público.