La Mercedes-Benz Vision Van, que a simple vista puede parecer solo un prototipo con diseño futurista de Mercedes-Benz Vans, en realidad es un vehículo revolucionario para el espacio urbano, gracias a la integración de gran número de tecnologías innovadoras para solucionar un sinnúmero de problemas del transporte.
Este nuevo modelo de lo que podría ser una futura generación de la Mercedes-Benz Sports, forma parte de una iniciativa estratégica de futuro, bautizada Mercedes-Benz adVANce, con lo que la marca alemana pretende pasar de ser un simple fabricante de vehículos comerciales, para convertirse en un proveedor de soluciones integradas.
La Mercedes-Benz Vision es la primera furgoneta del mundo capaz de asumir todas las funciones de una cadena de proceso digitalizada e interconectada; desde el centro de distribución de mercancías hasta el destinatario final.
Para lograrlo, cuenta con un espacio de carga completamente automatizado, drones integrados para la entrega autónoma y un moderno mando por joystick, con el que el operador realiza funciones mínimas.
La Vision Van cuenta con tren motor eléctrico que desarrolla 75 kW de potencia y alcanza una autonomía de hasta 168 millas por carga de batería (270 kms.). El motor eléctrico asegura además la posibilidad de utilizar el vehículo en entornos con restricciones de circulación para los vehículos con motor de combustión de gasolina, como por ejemplo algunos cascos urbanos.
Dado que la propulsión eléctrica trabaja prácticamente sin ruidos, además facilita la entrega en horas de la noche, en zonas residenciales si se ha elegido la opción de entrega en el mismo día.
Mercedes-Benz Vision Van, el futuro del transporte
Cuenta con software de gestión basado en una nube de datos en combinación con el hardware ideal para distribución e interconecta en red numerosas tecnologías, para convierte así el elemento central inteligente de una cadena de reparto.
Con ayuda de algoritmos avanzados se puede controlar la preparación y la carga de los bultos, la gestión completamente automatizada del espacio de carga y la planificación de la ruta para el vehículo y para los drones de reparto. También se calculan así los trayectos ideales para el repartidor.
Los envíos se preparan automáticamente en el centro logístico y se almacenan en un sistema especial de estanterías. Luego, vehículos de transporte no tripulados cargan las estanterías utilizando un procedimiento automatizado especial, denominado One Shot Loading o carga en una sola operación.
La gestión inteligente del espacio de carga selecciona los paquetes para la entrega manual una vez que el vehículo ha llegado al punto de descarga, y los entrega al repartidor mediante una esclusa interna en la cabina. En paralelo, el sistema carga dos drones con una carga útil de 4.4 libras (2 kilos) cada uno para su entrega autónoma dentro de un radio de 6.25 millas (10 kms).
La interacción de un software de control basado en una nube de datos con el hardware optimizado, genera un ahorro considerable de tiempo y un aumento de la eficiencia, y eleva a un nivel desconocido hasta ahora la calidad y la flexibilidad de los servicios de reparto en espacios urbanos.
El vehículo ofrece nuevas soluciones para la entrega de paquetes en el mismo día del pedido, así como para una entrega puntual, exactamente a la hora deseada por el destinatario, con lo que aumenta la satisfacción del consumidor final y disminuye el porcentaje de intentos fallidos de entrega.
Diseño de las vans de "pasado mañana"
El diseño y la integración de tecnologías de este prototipo son tan avanzados, que Mercedes-Benz Vans lo describió como un anticipo de la generación de furgonetas de "pasado mañana".
La fisonomía del vehículo está definida por el parabrisas extremadamente ancho, que se prolonga y se curva a modo de visera de alta tecnología hasta las paredes laterales, la parrilla del radiador Black Panel con matriz de LED integrada que utiliza para la comunicación con su entorno y los faros de técnica LED y diseño progresista.
Los contornos de estos elementos contrastan con las superficies suaves del vehículo y describen una atractiva bipolaridad: pasión y emoción por un lado y técnica y funcionalidad por el otro. El vehículo utiliza visualizadores LED en la parte delantera y trasera para transmitir información a su entorno.
Por ejemplo, emite indicaciones de advertencia cuando despegan los drones de reparto, cuando se detiene el vehículo o cuando el repartidor baja de la cabina.
El diseño interior apunta al futuro con una reducción extrema a elementos funcionales. Por ejemplo, no cuenta con volante, pedales o consola central, y su operación bajo el concepto de conducción Drive-by-Wire, es mediante un joystick, como en los video juegos.
Se obtiene así un habitáculo singular, centrado en torno a una comunicación inteligente entre el conductor y el vehículo. El conductor puede desplazar además el asiento hacia delante para aumentar la superficie útil del vehículo.
El tablero de instrumentos en forma de arco se extiende a lo ancho de todo el frontal y está recubierto de un forro textil de alta calidad. La superficie completa de este arco se utiliza para poner a disposición del conductor todas las informaciones que necesita durante su trabajo.
Cuando la Vision Van está detenida, el arco muestra una superficie homogénea de color azul con un degradado lineal a negro. Durante el trabajo brillan determinados elementos, como un velocímetro, informaciones sobre la planificación de la ruta e indicaciones acerca del vuelo de los drones.
El vehículo se comunica con el conductor también mediante el piso de la cabina, con indicadores de LED que brillan en el piso de acero inoxidable y señalizan al conductor del vehículo, por ejemplo, si puede bajarse con seguridad o se acercan peatones o ciclistas.
En la pared posterior de la cabina del conductor se encuentran la esclusa para paquetes y el terminal de información para el conductor, que pone a disposición todos los datos relevantes sobre el proceso de reparto. Este componente se utiliza asimismo para la comunicación entre los sistemas de funcionamiento autónomo de la Vision Van y el conductor, que puede concentrarse plenamente en el reparto manual.
También actúa como unidad central de control para la interconexión en red del vehículo inteligente con los sistemas automatizados y con las informaciones en torno a los pedidos.
Al mismo tiempo, la concepción del interior facilita las secuencias de trabajo y ofrece más comodidad al conductor. La supresión del volante, los pedales y la consola central crea máxima libertad de movimiento en la cabina del conductor y asegura una subida y bajada del vehículo sin obstáculos.
La propulsión eléctrica del vehículo permite prescindir de una cadena de transmisión, lo que hace posible configurar un piso completamente liso en la cabina. La esclusa para paquetes en el vehículo ahorra al conductor el tiempo y el esfuerzo necesarios para buscar y reordenar los paquetes en un espacio de carga convencional. Además, el conductor puede recoger los paquetes en una posición erguida y ergonómica.