Hennessey Venom F5 es la más reciente creación de la marca Hennessey , un superauto con el que quieren romper récords de velocidad, y convertir este auto en un ícono. Y es que el Hennessey Venom F5 apunta a las 300 mph, buscando ser el primer auto de calle de "producción" en lograr alcanzar dicha velocidad.
Pero la historia es un poco diferente al pasado Venom que logró establecer varias marcas de velocidad pero nunca como auto de producción debido a las pocas unidades que llegaron a manos de clientes. La primera diferencia es que este es un auto hecho del piso hacia arriba, por lo que el chasis (y la estética) de Lotus han desaparecido. Ahora el auto cuenta con un monocasco de fibra de carbono y una carrocería 100% original del mismo material ligero.
El tren motriz no es algo moderno auxiliado por electricidad, sino un enorme bloque V8 de 7.4 litros auxiliado por dos turbos que en total producen 1,600 caballos de fuerza y 1,300 libras-pie de torsión. Toda esta potencia se va a las ruedas traseras mediante una caja secuencial de siete marchas y clutch sencillo. De forma opcional está disponible una caja manual, pero la advertencia es que estarás batallando con derrape de llantas y el control de tracción basado en GPS hasta las 140 millas por hora.
Hennessey Venom F5, un bólido devorador de asfalto
Hablando de velocidad, cuando el auto está equipado con el modo Vmax, el alerón trasero baja y los ductos se sellan en un esfuerzo para reducir el arrastre. En combinación con un coeficiente de arrastre de 0.33, que se compara con el del Venom GT de 0.44 Cd y del Bugatti Chiron de 0.38 Cd, el Hennessey Venom F5 apunta a las 300 mph, o más precisamente a las 301 mph. Esto con una aceleración de 0 a 186 mph en 10 segundos y a 249 mph en menos de 20.
Tan solo 24 ejemplares del Venom F5 serán construidos en las instalaciones de Hennessey en Texas, cada uno a un precio de $1.6 millones de dólares con opciones que pueden aumentar el precio en $600,000.