Los días de Jaguar Land Rover han llegado oficialmente a su fin, al menos en cuanto al nombre se refiere. El fabricante de automóviles de lujo con sede en el Reino Unido ahora se llama oficialmente JLR. Probablemente puedas adivinar de dónde provienen las tres letras, pero esto va más allá de ser solo una abreviatura de un título un tanto incómodo. Se trata de una nueva identidad corporativa mediante la cual los emblemáticos vehículos de Land Rover pasarán de convertirse en meros modelos a ser marcas independientes bajo un nuevo paraguas de JLR y en igualdad de condiciones con Jaguar.
Dicho en otras palabras, Defender, Range Rover y Discovery serán marcas independientes, igual que Jaguar.
La noticia de este cambio la conocimos por primera vez hace algunas semanas cuando se reveló la estrategia "Reimagine" de JLR, que llega acompañada por una inversión de $18,600 millones.
JLR, mucho más que un logotipo nuevo
Como es lógico imaginar al conocer esa cantidad de dinero es que la estrategia del fabricante británico está haciendo mucho más que simplemente crear un nuevo logotipo. Las instalaciones de fabricación están siendo actualizadas y renovadas para el futuro eléctrico.
Al respecto, ya conocemos el próximo tren motriz eléctrico de JLR, la plataforma ELR de próxima generación para SUV eléctricos, que se espera que sea la base del Range Rover EV en 2025. En el caso de Jaguar, también llegará la nueva plataforma JEA en ese año, para tres nuevos vehículos eléctricos, incluido un GT de cuatro puertas.
Lo anterior no significa que JLR esté abandonando los 75 años de prestigio de la marca Land Rover. Los SUV seguirán llevando distintivos de Land Rover, y el nombre perdurará como un sello distintivo de la compañía. Los ejecutivos vislumbran a la reimaginada JLR como una Casa de Marcas que conservará el lujo tradicional que todos conocemos.
Con esta nueva identidad corporativa y su enfoque en la electrificación, JLR busca reinventarse y adaptarse a las demandas cambiantes de la industria automotriz.
