Uno de los motivos para que Dodge deje la NASCAR después de la temporada actual es la aparente incapacidad de la automotriz por conseguir un equipo y pilotos de primera línea para sus autos para la próxima temporada. Sin embargo se sospecha que los millones de dólares necesarios para invertir en un programa de carreras, sumado al desinterés del jefe de Chrysler, Sergio Marchionne, por esa forma de competencia (al parecer es más bien fanático de la Fórmula Uno) fue lo que dio vuelta la página a NASCAR. En definitiva, todo se reduce a la capacidad de NASCAR para influir sobre las decisiones de compra. Con toda la maquinaria que luce prácticamente idéntica, excepto por las diferentes insignias, qué sentido tiene que una fabricante esté interesada.