Un grupo de australianos han encontrado la solución para evitar que los conductores utilicen el teléfono celular, coman o beban mientras conducen su automóvil.
Para lograr lo anterior el centro de investigación Emotive y el Real Club de Automoción de Australia han desarrollado una tecnología que frena el vehículo cuando los sensores detectan que el conductor se está distrayendo.
Este sistema consta de un auricular, el cual se coloca en la cabeza del piloto y da seguimiento al funcionamiento del lóbulo frontal del cerebro. Es parte del nuestro organismo es la responsable de la recolección y la distracción.
Una vez que el sistema detecta que el conductor distrae su atención al camino por múltiples factores, este envía una señal y disminuye la velocidad del automóvil.
Hasta ahora el valor real de esta tecnología es mostrar a los conductores con qué facilidad y con frecuencia se distraen mientras manejan. Bien podría ser una valiosa herramienta de enseñanza que educará a los jóvenes conductores sobre cómo mantener la concentración durante la conducción.
Sin duda es un proyecto interesante que seguro tendrá aplicación comercial en los próximos años.