Los Departamentos de Policía de la Florida y Iowa han comenzado a implementar un nuevo sistema llamado StarChase, que tiene como objetivo hacer que las persecuciones de vehículos sean más seguras. Cada año en Estados Unidos existen al menos 100,000 persecuciones a alta velocidad, donde todos los automóviles involucrados suponen un peligro para las ciudadanos.
Básicamente el sistema creado por la compañía StarChase, equipa a la patrulla con un sistema que tiene un cañón de aire comprimido, el cual dispara un dispositivo de rastreo GPS al vehículo que trata de escapar, lo que permite a la policía a seguirlo desde una distancia segura a través de la computadora .
Esta tecnología tiene un costo de 5,000 dólares para la instalación del disparador en cada patrulla, mientras que cada proyectil de GPS tiene un valor de 250 dólares.