ZF y Levant Power están desarrollando un sistema de suspensión eléctrica activa y regenerativa que podría dar más poder a los vehículos híbridos.
Este sistema funciona mediante la instalación de una válvula, una unidad de control, un motor eléctrico y una bomba de engranajes electrohidráulica en el amortiguador. La válvula utiliza la oscilación de la amortiguador para accionar la bomba eléctrica y convertir el movimiento en electricidad, misma que se dirige al sistema híbrido. La bomba permite que el amortiguador se adapte a las condiciones de conducción mediante el aumento o la disminución de la presión sobre el fluido el amortiguador.
Esta tecnología permite aprovechar la energía desperdiciada para ser convertida en electricidad y sería usado en conjunto con el sistema de frenado regenerativo. ZF y Levant no han dicho la cantidad de energía que el sistema podría generar por medio del accionamiento de la suspensión.