Por años, Emory nos ha cautivado con sus estupendas preparaciones basadas en distintos modelos de Porsche. De hecho, sus trabajos realizados sobre el legendario modelo 356 han sido verdaderamente fantásticas y la más reciente es simplemente es fenomenal: Porsche Outlaw 911K.
El modelo elegido por el preparador norteamericano para este nuevo trabajo es un Porsche 911 SWB 1968, al cual ha rediseñado para recordarnos a los impresionantes modelos de rally creados por el fabricante alemán y que obtuvieron muchos logros en las pistas de todo el mundo.
Ante este proyecto Rod Emory comentó: “Nos especializamos en el modelo 356 e hicimos el Porsche Outlaw 911K como una comisión única para un cliente especial. La inspiración proviene del Porsche 908-010, un prototipo deportivo con carrocería K que fue pilotado por Vic Elford. Las señales de diseño y los colores de este automóvil los hemos plasmado maravillosamente en esta construcción”.
Porsche Outlaw 911K, exterior
Ante esta afirmación, a nosotros no nos queda más que decir que de hecho han plasmado la esencia de este vehículo de competición estupendamente bien. Por fuera nos encontramos con la carrocería acabada en color blanco con un pequeño rasgo de pintura color amarillo claro en la fascia delantera, y el pequeño Pegaso en el mismo tono.
Además de lo anterior, al frente del Porsche Outlaw 911K se han colocado luces auxiliares estilo rally que le dan un aspecto más deportivo al vehículo, combinados con unas pequeñas bocinas de aire para el claxon, instaladas en la parte baja del parachoques frontal, protecciones de malla en las entradas de aire, tapa de la cubierta del motor con doble parrilla, además de bisagras y parachoques estilo R.
Interior
Al interior del Porsche Outlaw 911K, resaltan los asientos de cubo inspirados en los que portaba el Porsche 908, cubiertos con protecciones Red Veltex y cinturones de seguridad Momo de 5 puntos, al igual que el volante y el pomo de la palanca de cambios, suministrados por la misma marca y fabricados al estilo de los autos de competencia de los años 60. El conjunto se complementa con la jaula antivuelco extraíble y los paneles ligeros colocados en las puertas para reducir el peso.
Pero sin duda, la parte más emocionante de este modelo se encuentra en la parte posterior, donde podemos encontrar un poderoso motor de 6 cilindros tipo bóxer de 2.5 litros que entrega 190 caballos de fuerza, con encendido MSD y carburadores Weber 40IDA 3C. Este conjunto se acopla a una transmisión manual de 5 velocidades, procedente de un Porsche 901.
Para controlar toda esta potencia, bajo la carrocería se ha montado un nuevo sistema de suspensión, diseñado específicamente para este modelo con amortiguadores de gas KW de 3 vías, totalmente ajustables, además de los nuevos frenos con cálipers Salloy 911, montados detrás de los neumáticos Pirelli CN36, que incorporan unos hermosos rines de 15 pulgadas y 5 radios acabados en color negro y con centro de bloqueo proveniente de un Porsche 935 Carrera.
Emory aún no ha dado a conocer cuál fue el precio final de esta impresionante preparación, aunque seguramente fue bastante elevado debido a los materiales tan exclusivos que se utilizaron en su construcción, provenientes de modelos clásicos de la firma de Stuttgart. Un pequeño lujo que bien vale el costo de producción.
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