Bugatti Centodieci es sometido a extenuantes pruebas en el circuito de Nardó. Foto: Bugatti
Bugatti Centodieci, el aerodinámico modelo de la firma de Molsheim que rinde homenaje al superdeportivo definitivo de la década de 1990: el EB110, está a punto de llegar a sus afortunados propietarios.
Como sabemos, el Bugatti Centodieci está equipado con un motor V12 de 3.5 litros con cuatro turbocompresores que produce 1600 hp vinculado a un sistema de tracción total y un monocasco de fibra de carbono.
Solo se fabricarán diez ejemplares del Centodieci, pero el fabricante francés está poniendo la misma energía en desarrollarlos y probarlos que dedica a sus “modelos de serie”, como el Bugatti Chiron.
Cada día recorre más de 700 millas de pruebas. Foto: Bugatti
Bugatti Centodieci sometido a pruebas extenuantes
En el transcurso de muchos meses, los conductores de pruebas e ingenieros de Bugatti han recopilado datos técnicos, al tiempo que adquieren una valiosa experiencia a alta velocidad, en el manejo de rutas y circuitos, en carreteras y en el tráfico urbano, todo lo cual se comparte con el departamento de desarrollo técnico de Bugatti Engineering. para una evaluación minuciosa. El prototipo de producción del Centodieci completó más de 30,000 millas de prueba en total a su regreso de Nardò.
El prototipo blanco completa diariamente muchas millas. Tres conductores rotan para examinar todas las funciones del Centodieci, registrando cada anomalía menor. Conducen de día y de noche en diferentes perfiles de pista y en todos los rangos de velocidad, desde un ritmo lento hasta la velocidad máxima.
Las pruebas de resistencia requieren que los conductores posean un conocimiento técnico sobresaliente, máxima concentración y sensibilidad, así como un dominio preciso del vehículo. Incluso después de horas en la pista de alta velocidad, deben ser capaces de percibir los más mínimos ruidos, movimientos e irregularidades atípicos. Todo se inspecciona una última vez: conducción en diferentes superficies, tanto mojadas como secas, probando cada pequeño movimiento de dirección, frenado, aceleración, carga en las curvas y funcionalidad de los sistemas de asistencia al conductor.
Una vez finalizadas las pruebas, entrará a la etapa de producción. Foto: Bugatti
Más de 700 millas recorridas diariamente
La pista circular de 7.8 millas con un diámetro de 2.4 millas se considera el circuito automovilístico más rápido del mundo, perfecto para la velocidad máxima de 237 mph del Centodieci.
El superauto francés recorre hasta 746 millas cada día, interrumpidos únicamente por controles técnicos, repostaje y cambios de conductor. Durante todo el tiempo, los ingenieros de Bugatti analizan los datos del motor y del vehículo y hacen los ajustes necesarios.
Tan pronto como se complete la evaluación final, el primero de estos vehículos altamente exclusivos, cada uno con un precio inicial de ocho millones de euros ($8.8 millones), entrará a la etapa de producción.
