El eléctrico de la casa de Zuffenhausen sigue haciendo de las suyas. Primero lo vimos ascendiendo a los escarpados territorios del Tíbet y ahora, un Porsche Taycan 4S Cross Turismo ha completado un viaje a lo largo del llamado “quinto continente”, desde Darwin hasta Bondi Beach, recorriendo más de 3,000 millas (5,000 kilómetros).
En efecto, el sedán cero emisiones está dispuesto a demostrar que es mucho más que una cara bonita. Durante este recorrido, el Taycan 4S no solo presumió su notable autonomía, sino también su desempeño en algunos de los territorios más inhóspitos de Australia. Al mismo tiempo, también destacó la expansión continua de la red de infraestructura de carga en aquel país.
Diecinueve días a bordo del Porsche Taycan 4S Cross Turismo por Australia
Durante este recorrido se utilizó una amplia variedad de estaciones de carga, localizadas en lugares tan lejanos como las grandes explotaciones ganaderas en el Outback hasta estaciones de carga rápida y puntos de Porsche Destination Charging. A lo largo del tour, el Taycan 4S Cross Turismo demostró su durabilidad y eficiencia en diversas condiciones climáticas y terrenos, desde el Territorio del Norte hasta la icónica playa de Bondi en Sídney.
Al estar configurado con el cargador opcional de 22 kW, el Taycan 4S Cross Turismo pudo acortar los tiempos de carga en lugares remotos. A lo largo de los 19 días de viaje, se realizaron un total de 27 escalas para recargar las baterías, sumando un total de 85 horas de carga, la mayoría de las cuales tuvieron lugar durante la noche.
En el itinerario de la travesía se encontraban varios destinos destacados, como el Parque Nacional y el desfiladero de Nitmiluk localizado en Katherine, Territorio del Norte. Los integrantes de la expedición también visitaron la localidad rural de Daly Waters y se enfrentaron a la imponente duna de arena conocida como "Big Red" en el desierto de Simpson, en Queensland. También hicieron una escala en el circuito de Bathurst, pasando por las Montañas Azules hasta llegar al paraíso de los surfers, en la icónica playa de Bondi, en Nueva Gales del Sur.