En la planta de Porsche ubicada en Sajonia, los empleados celebran un logro significativo en la producción: el Porsche número dos millones fabricado en Leipzig ha salido de la línea de ensamblaje. Se trata de un Panamera Turbo E-Hybrid, ataviado en un elegante color oro Madeira metalizado.
Cuando el Panamera fue lanzado en 2009, su producción y pintura tenían lugar inicialmente en instalaciones pertenecientes al Grupo Volkswagen. La planta de montaje de Leipzig, inaugurada en 2002, se convirtió en una fábrica completa con la expansión. La producción de la segunda generación de este sedán alemán comenzó en esta planta en 2016, coincidiendo con el inicio de operaciones de la primera nave de carrocerías y el taller de pintura en noviembre de 2013.
La factoría de Leipzig, en camino de convertirse en un referente
En los últimos años, esta factoría ha evolucionado para convertirse en un centro enfocado en la movilidad eléctrica. La hoja de ruta del fabricante alemán contempla que, en un futuro no muy lejano, en estas mismas instalaciones se fabriquen tres tipos de sistemas de propulsión: combustión, eléctricos e híbridos en una sola línea.
A través de su trayectoria, la planta de Porsche en Leipzig ha sido galardonada en diversas ocasiones, incluyendo el reconocimiento como "fábrica inteligente". Uno de los primeros desafíos a los que se enfrentó el fabricante alemán fue optimizar las instalaciones y procesos para el futuro, adoptando un enfoque inteligente, digital y conectado.
Además, esta factoría está enfocada en convertirse en una Fábrica de Impacto Cero.
