Nuestros colegas de Motor1 han publicado un singular video que muestra una carrera poco común: un Lucid Air Sapphire con sus 1,234 caballos de fuerza se enfrenta a un Dodge Challenger Demon 170, un poderoso monstruo impulsado por un motor de combustión interna, capaz de recorrer el cuarto de milla en menos de 9 segundos.
Aunque pareciera que ambos coches provienen de mundos distintos, en realidad tienen una característica en usual: cuentan con un poder de aceleración increíble. El video, subido al canal de DragTimes, nos muestra ambos coches, uno al lado del otro, en una carrera que, sobre el papel, debería ser muy ajustada. Sin embargo, la realidad es muy diferente.
Dodge Challenger SRT Demon 170, 1,000 hp para sacar fuego a la pista. Foto: Dodge
Lucid Air Sapphire se enfrenta a un poderoso muscle car
Antes de entrar en detalles sobre la carrera, es conveniente recordar las credenciales de ambos autos. El Dodge Challenger Demon 170 está impulsado por un motor V8 sobrealimentado de 1,025 caballos de fuerza. Se trata, sin duda, de un muscle car desarrollado para devorar la pista de cuarto de milla.
Por el otro lado tenemos al Lucid Air Sapphire, un sedán equipado con tres motores que proporciona 1,234 caballos de fuerza. En este caso, este sedán eléctrico no cuenta con neumáticos especiales para pista, en su lugar, rueda sobre llantas Michelin Pilot Sport, adecuados para la calle.
Aunque para este momento seguramente ya has visto el video que acompaña este post, el Demon 170 no fue rival para el Lucid Air Sapphire. En la primera de tres carreras, el Demon logró su mejor tiempo con 9.49 segundos a 144.8 mph. Pero el Sapphire fue significativamente más rápido, recorriendo el cuarto de milla en solo 9.01 segundos a 153 mph.
Además, el sedán eléctrico mostró un desempeño excepcional desde la línea de salida, con un tiempo de 1.44 segundos para recorrer los primeros 60 pies, un indicador de un potente arranque, incluso sin llantas de drag. El Demon también arrancó fuerte, pero con un tiempo de 1.48 segundos, simplemente quedó abajo en las expectativas.
