El Honda Civic 2018 diésel i-DTEC es una de las variantes de la 10ma. Generación del Honda Civic que no llegará al mercado de Estados Unidos. El nuevo Civic diésel se presentará oficialmente en el Auto Show Frankfurt del 14 al 24 de septiembre.
En otros mercados fuera de Estados Unidos, el Honda Civic 2018 diésel i-DTEC de cuatro cilindros y 1.6 litros que genera 120 caballos de fuerza, se sumará a la familia Honda Civic a partir de marzo próximo, tras una revisión exhaustiva para que ofrezca una combinación extraordinaria de rendimiento y ahorro de combustible.
Este nuevo motor ha sido uno de los primeros en superar el nuevo del ciclo de emisiones y consumo de combustible para vehículos ligeros a nivel mundial (WLTP, del inglés Worldwide Harmonised Light Vehicle Test Procedure), que entra en vigor este año.
Mientras que el hasta ahora conocido ciclo NEDC (del inglés New European Driving Cycle) se basa en un perfil de conducción teórico, el ciclo WLTP se ha desarrollado con datos de conducción reales recopilados en todo el mundo. Así pues, está diseñado para ofrecer resultados más fieles a la conducción real.
Honda ha realizado mejoras significativas en el motor y el sistema de escape con el fin de maximizar el rendimiento en condiciones reales de conducción.
Las mejoras en cuanto a eficiencia del nuevo Honda Civic 1.6 i-DTEC se traducen en un consumo de combustible a partir de 67 millas por hora (3,7 l/100 km*) y unas emisiones de CO2 de 99 g/km (según el ciclo WLTP)*.
Entre las mejoras realizadas en el motor diésel de 1,6 litros, destaca la reducción de la fricción de los cilindros —gracias a unos pistones fabricados con una aleación de acero con cromo y molibdeno de gran durabilidad—, así como nuevo y avanzado sistema de esmerilado de los cilindros con la finalidad de conseguir desplazamiento más fluido de los pistones.
Honda Civic 2018 diésel i-DTEC, potencia y eficiencia
El motor de 1597cc de cilindrada emplea el mismo sistema de inyección de combustible avanzado de Bosch utilizado en la versión anterior de este propulsor e incorpora un compacto turbocompresor de alta eficiencia además de un sistema de recirculación de los gases de escape (EGR) de baja presión.
También cuenta con un renovado diseño de los puertos de admisión desarrollados para favorecer un eficaz flujo de admisión del dié.
Gracias a un cigüeñal ligero y de gran resistencia, y un bloque de motor moldeado con aluminio de alta presión, se ha conseguido minimizar el peso del motor. Además, gracias a la adopción de unos rebordes fundidos adicionales en el bloque de cilindros se ha conseguido aumentar la rigidez estructural, lo que permite a su vez controlar mejor el ruido y las vibraciones.
El nuevo motor 1.6 i-DTEC de Honda es uno de los primeros en superar el test de emisión de partículas y NOx “RDE” (del inglés Real Driving Emission).
El conjunto propulsor diésel cuenta con un nuevo sistema de conversión del almacenamiento de NOx (NSC, del inglés NOx Storage Converter) con catalizadores de mayor tamaño y un contenido más alto de metales nobles (plata, platino y neodimio) que almacenan gas de óxido de nitrógeno hasta el ciclo de regeneración.
Un sensor de hollín detecta de forma precisa cuándo es necesario el ciclo de regeneración, lo que incrementa la durabilidad del sistema de escape.
El motor 1.6 i-DTEC genera 88kW (120 caballos de fuerza) a 4,000 revoluciones por minuto pm y 221 libras por pie lineal de torsión (300 Nm de par) a 2,000 revoluciones por minuto, lo que permite al Civic acelerar de 0 a 60 millas por hora (0 a 100 km/h.) en 10,2 segundos.
El nuevo motor, que se ensamblará en la fábrica Honda UK Manufacturing, en Swindon, Reino Unido, estará disponible tanto en las versiones de cuatro puertas como de cinco puertas de la décima generación del Civic.
Honda no ofrece ningún modelo con motor diesel en el mercado de Estados Unidos, donde esta tecnología perdió mucha de su popularidad en los vehículos de producción general, tras el escándalo de Volkswagen por el uso de un software que alteraba los resultados de las pruebas de emisiones contaminantes.
A mediados del 2018, el nuevo propulsor diésel del Civic contará opcionalmente con una transmisión automática de nueve velocidades, una combinación única, puesto que será la primera vez que la adopta un automóvil con tracción delantera.
* Datos internos de Honda
Honda Civic 2018 diésel i-DTEC, probado científicamente
WLTP: El procedimiento de prueba de vehículos ligeros armonizado a nivel mundial (WLTP, del inglés Worldwide Harmonised Light Vehicle Test Procedure) se ha diseñado para proporcionar unas condiciones más realistas en las pruebas a la hora de calcular las emisiones y el consumo de combustible del vehículo.
El ciclo de conducción se divide en cuatro secciones con velocidades medias distintas: baja, intermedia, alta y extra alta. Cada sección contiene diversas fases de conducción, además de fases de detención, aceleración y frenado.
Para cada nuevo tipo de vehículo, la configuración de cada conjunto propulsor se prueba en las versiones más ligeras y pesadas del coche de conformidad con el WLTP.
Pruebas RDE: Las pruebas RDE (del inglés Real Driving Emission, emisiones en conducción real) miden los agentes contaminantes, como el NOx, que emiten los vehículos mientras circulan.
Las pruebas RDE se llevarán a cabo junto con el ciclo NEDC actual y los futuros ciclos de pruebas WLTP como proceso de validación. Las pruebas RDE garantizan que los vehículos generen unas emisiones reducidas en condiciones de circulación por carretera en Europa.
Estas pruebas se realizan como parte de la aprobación de tipo de emisiones en vías públicas con tráfico real mediante un sistema portátil de medición de emisiones (PEMS).
En un principio, solo las emisiones de NOx y partículas se incluyen dentro de los límites vinculantes. El límite inicial de NOx para motores diésel que estipulan las pruebas RDE es de 168 mg/km, el cual entra en vigor el 1 de septiembre de 2017 para los nuevos tipos de vehículos.