La presencia de Mercedes-Benz en Stuttgart empezó mucho antes del 29 de enero de 1886, cuando Karl Friedrich Benz patentó la invención que cambiaría al mundo.
El registro de la patente número DRP-37435 de su triciclo motorizado ha quedado marcado en la historia de la industria automotriz como el día del nacimiento del auto moderno, pero en esa época ya había otros inventores e ingenieros que desarrollaban motores de combustión interna, como sus compatriotas Gottlieb Daimler y Wilhelm Maybach, quienes por coincidencia trabajaban muy cerca de Stuttgart.
Los trabajos para desarrollar el primer motor de combustión interna de bajo peso y dimensiones compactas conocido como el "reloj de pie" empezaron un par de años antes de que Benz lograra incorporarlo a su triciclo.
Las empresas de Daimler y Benz siguieron trabajando independientemente hasta que en la década de 1920 comenzaron a cooperar para poder superar la depresión económica dejada por la I Guerra Mundial. Finalmente se fusionaron en 1926 para crear Daimler-Benz AG.
A lo largo de su historia, algunos de los ingenieros más importantes de toda la industria automotriz, como Ferdinand Porsche y Wilhelm Maybach, trabajaron para Daimler-Benz AG .
Mercedes-Benz en Stuttgart la ciudad donde nació el auto
En actualidad, la marca de la estrella de tres puntas - que simboliza su capacidad de fabricar motores para la tierra, el mar y el cielo -, domina el paisaje urbano e industrial de Stuttgart, donde tiene su sede global, además de la planta Mercedes-Benz Sindelfingen y el nuevo Museo Mercedes-Benz que abrió sus puertas en 2006.
La planta de Sindelfingen fue fundada en 1915 y en la actualidad emplea a más de 25,000 personas, que producen 10 modelos - Mercedes-Benz CLS, CLS Shooting Brake, E-Class (sedan y Station wagon), S-Class (sedan, coupé y cabriolet), la familia Mercedes-AMG GT y el Mercedes-Maybach, y más de 310,000 unidades anualmente.
Además, es el centro de investigación y desarrollo de ingeniería más avanzado del mundo para la producción de motores cada vez más potentes y eficientes, sistemas de propulsión alternativos, como los híbridos y las celdas de hidrógeno.
En el futuro, la planta Mercedes-Benz Sindelfingen producirá los vehículos 100% eléctricos de la nueva submarca Mercedes-Benz EQ.
Por su parte, el Museo Mercedes-Benz Stuttgart, que celebró recientemente su 10mo. aniversario, es el único lugar del mundo donde se puede explorar en vivo el verdadero origen del auto y la historia de su inventor.
Durante nuestra reciente visita a Stuttgart para conocer los detalles de la nueva van comercial Mercedes-Benz Sprinter 2019, pudimos explorar un poco más de la historia de la marca alemana y sus planes de constante expansión global.