Top 10 curiosidades de Henry Ford que quizá desconocías

Por autoproyecto - 2017/09/07

Las curiosidades de Henry Ford nos dejan ver su lado más humano

Henry Ford nació en el año de 1863

Todos sabemos de la importancia de este personaje dentro de la industria de los autos y su famosa producción en serie, pero hay algunas curiosidades de Henry Ford que hoy te contamos aquí y que estamos seguros que desconocías.

–          En 1891, Henry Ford trabajó en el negocio de Tomas Edison: Edison Illuminating Company. Para 1898 ya había reunido el dinero suficiente como para emprender su propia empresa y renunció a ese trabajo.

–          La empresa de Henry Ford  fue la primera en establecer una maquinaria publicitaria para ser conocida en todo Estados Unidos.

–          Durante el año 1918, quien fuera presidente de Estados Unidos, Woodrow Wilson, instó a Henry Ford a ser parte del Senado. En cambio, Ford se presentó como candidato por la paz y su objetivo era garantizar la paz mundial tras la Primera Guerra Mundial.

–          Ford nunca creyó en la utilidad de los contadores (Lic. en Contabilidad) ya que pensaba que era más lo que cobraban que lo que en verdad hacían.

–          Henry Ford tuvo su propia compañía de aviones, ya que luego de la 1ª Guerra Mundial adquirió la empresa Stout Metal Airplane Company.

–          En su cumpleaños número 75, Ford fue condecorado por Hitler con la Gran Cruz del Águila Germana, por su invaluable apoyo a la causa nazi.

–          Según el ministro episcopal Samuel S. Marquies, Henry Ford creía, o en algún momento creyó, en la reencarnación.

–          Durante todo el tiempo en su propia compañía, Ford nunca tuvo un “título” de ejecutivo (CEO, Director, Presidente, etc.).

–          Los últimos años de su gestión fueron realmente complicados. Hubo una época en que la empresa perdía un promedio de 10 millones de dólares al mes. El gobierno estuvo a punto de tomar el control de Ford Motor Company.

–          Una de las curiosidades de Henry Ford que más nos sorprende es el hecho de que nunca fue un apasionado de las carreras (nunca imaginó éxitos como el del Ford GT40). De hecho, siempre les tuvo algo de desprecio y, a pesar de ello, la marca fue incluido en el Salón de la Fama del Automovilismo de Estados Unidos.

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