El gigante japonés Toyota terminó su acuerdo con Tesla, para poner énfasis en el desarrollo de sus propios autos eléctricos, según reportes de la prensa publicados el sábado.
Al momento de la firma del acuerdo iniciado en 2010, Toyota no solo se comprometió a compartir información sobre desarrollo e ingeniería, sino que además había adquirido 3% de la marca de lujo con sede en Palo Alto, a cambio de $50 millones.
En 2102 Toyota y Tesla desarrollaron una SUV con motores eléctricos y vendieron unas 2,500 unidades, principalmente en el mercado de California.
Sin embargo, los resultados de la sociedad fueron casi nulos y según los reportes publicados por diversos medios en Japón y en Estados Unidos, Toyota vendó todas sus acciones de Tesla en diciembre pasado “en un esfuerzo por revisar el destinos de sus inversiones”, dijo el diario japonés Asahi Shimbun.
“Nuestra sociedad de desarrollo con Tesla terminó hace tiempo y desde entonces no se ha producido ningún desarrollo en ese frente”, confirmó el portavoz de Toyota, Ryo Sakai.
Toyota, que es líder mundial en el desarrollo y la venta de modelos híbridos, y ya produce el Toyota Mirai 2016, el vehículo con celdas de hidrógeno, que fue certificado con un rendimiento oficial de 67 MPGe y un rango de hasta 312 millas por cada carga de hidrógeno, por la Agencia de Protección al Medio Ambiente (EPA).
Con estas cifras, el Toyota Mirai es el único vehículo eléctrico cero emisiones con un rango de independencia de más de 300 milas por carga, pero la falta de infraestructura para recargar los tanques de hidrógeno ha impedido que este tipo de autos sean más populares.
En noviembre pasado, Toyota nombró a un nuevo presidente para dirigir una nueva división de autos eléctricos y acelerar el desarrollo y venta de esa tecnología.
Tesla por su parte, reportó pérdidas por $330 millones en los primeros tres meses de 2017, ha visto un descenso en sus ventas y enfrenta presión por el supuesto atraso en la promesa de entregar las primeras unidades del Tesla Model 3 a finales de 2017.