Airspeeder Mk4, el primer auto de carreras volador tripulado del mundo. Foto: Alauda
Alauda Aeronautics tiene la firme intención de revolucionar para siempre el automovilismo mundial y para ello está dispuesto a dejar en el olvido la fricción de los neumáticos con el asfalto y pasar al aire a toda velocidad a bordo del Airspeeder Mk4, el primer auto de carreras volador tripulado del mundo, que está listo para inaugurar la categoría Airspeeder de carreras lo más pronto posible.
Completamente diseñado y construido en Adelaide, Australia, el Airspeeder Mk4 es una pieza de ingeniería única, que cuenta con un sistema eléctrico de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL) tan avanzado que es el más rápido del mundo, y que le permite al vehículo alcanzar una velocidad máxima de 223 millas por hora en apenas 30 segundos, lo que asegura competencias emocionantes en el aire.
Para construir este motor, Alauda Aeronautics se inspiró en los desarrollos más modernos de la industria aeroespacial. Foto: Alauda
Así se impulsa el Airspeeder Mk4
Para lograr esta velocidad vertiginosa, el Airspeeder se vale de un turbogenerador con 1000 kW de potencia, es decir unos 1,341 caballos de fuerza, que alimenta las baterías de cada motor, trabajando con hidrógeno como combustible, lo que asegura que toda la energía producida por este modelo es sostenible, segura y confiable, firmando una autonomía de unos 300 kilómetros por cada carga.
Para construir este motor, la empresa creadora se inspiró en los desarrollos más modernos de la industria aeroespacial, incorporando al modelo un combustor único fabricado con impresión 3D, con un diseño que ayuda a mantener la temperatura del hidrógeno relativamente baja, disminuyendo así también las emisiones de óxido nitroso.
Otro de los aspectos más relevantes del Airspeeder Mk4 es que en lugar de contar únicamente con un conjunto de motores con orientación vertical que le permiten acelerar y desacelerar, también suma un sistema novedoso de conducción con cardanes ligeros, que le permitirá al conductor sentirse a bordo de un avión de combate, añadiendo además mayor espacio de almacenamiento.
Así el Airspeeder sin ninguna modificación ya se erige como una opción de alto rendimiento para los campeonatos de automovilismo del futuro, inspirando una serie amplia de productos que incluirá en un futuro taxi volador que surcará los cielos con toda su tecnología y hasta una nueva categoría de competencia específica para este tipo de vehículos.
