En este vasto mundo automotriz y ahora, con el alcance de las redes sociales y la tecnología, es relativamente sencillo ver cosas insólitas como la que se dio a conocer hace algunos días y que tuvo lugar en Nebraska, uno de los estados más tradicionales y conservadores del oeste del país. Cerca de la ciudad de Norfolk, un hombre llamado Lee Meyer fue detenido por la policía mientras conducía por la U.S. 275, con un toro gigante de más de 1,500 libras en el asiento del copiloto de su Ford Crown Victoria.
Pero ¿Cómo diablos metió un toro en su coche?
Sí, leíste bien. Y no se trataba de un bovino cualquiera, sino de Howdy Doody, un toro de la especie Watusi que se caracteriza por su enorme cornamenta y que, además, goza de gran popularidad en ferias y eventos locales.
En el video que veremos al final de esta nota y que fue dado a conocer por WKMG News 6, se aprecia claramente que nuestro valiente amigo siente una verdadera pasión por los toros, dada la cornamenta que adorne el frente de su auto.
Para que Howdy Doody pudiera acompañarle, Lee Meyer hizo modificaciones en su Ford Crown Victoria, retirando los asientos del lado derecho del automóvil y recortando parte del techo para acomodar a su inusual copiloto.
Una especie de puerta improvisada (tomada probablemente de una cerca metálica) mantenía al toro seguro durante las curvas, sujeto simplemente con una cuerda. No hace falta decir que la policía de Norfolk recibió llamadas alarmadas sobre "una vaca en un coche" y no esperaba encontrarse con un toro del tamaño de un auto compacto. A pesar de ello, la policía no multó a Meyer, pero le advirtió que no podía circular de esa manera por la ciudad y que debía abandonar Norfolk. En el video que acompaña a la noticia se puede ver claramente cómo el coche se inclina debido al peso del enorme animal.
A pesar de todo, parece que Lee Meyer planea seguir llevando a su “pequeño” copiloto en coche por las zonas rurales de Nebraska, donde es conocido y querido, lo que sí es un hecho es que, de ahora en adelante, va a preferir las carreteras secundarias, donde no haya tantos mirones.