El nuevo Bentley Continental GT Speed se prepara para su debut mundial en el Festival de la Velocidad de Goodwood, luego de haberse llevado a casa el récord – no oficial – de ser el coche más rápido en atravesar el túnel más profundo bajo el nivel del mar. El superdeportivo de la casa británica, capaz de desarrollar 208 mph, estará presente en versiones coupé y convertible, y correrá dos veces al día en la famosa Subida de la Colina de Goodwood.
De igual forma, estará en exhibición un tercer vehículo, mostrado junto a un acuario gigantesco de tres toneladas, que contiene 1,400 litros de agua y 30 peces Shubunkins y otros peces dorados. Este display busca rendir homenaje al récord de “Velocidad Submarina” logrado por el sedán británico.
Bentley Continental GT Speed, el sedán más rápido “bajo el mar”
Fue el pasado 18 de abril cuando el nuevo Continental GT Speed alcanzó su velocidad máxima en el túnel Ryfylke de nueve millas de longitud (14.5 km) en Noruega. Se trata del túnel de carretera más largo y el que se encuentra a mayor profundidad con respecto al nivel del mar (292 metros).
Equipado con el nuevo tren motor híbrido, el sedán británico desplegó sus 771 caballos de fuerza y 737 libras-pie de par para lograr esta hazaña, que requirió 13 meses de preparación y planificación.
Así se logró filmar el video en el túnel
El túnel Ryfylke, cerca de Stavanger, en Noruega, fue el escenario ideal debido a sus tramos rectos y considerable longitud. Se utilizaron simulaciones de Dinámica de Fluidos Computacional para estudiar la física del coche a velocidad máxima, también se analizaron las cargas aerodinámicas bajo el túnel y muchos otros aspectos antes de llevar a cabo la proeza.
El Continental, preparado específicamente para carreras de alta velocidad con una jaula antivuelco y asientos de cubo, estaba equipado con neumáticos Pirelli de 22 pulgadas que previamente fueron radiografiados para detectar cualquier inconsistencia interna. El excampeón británico de rally, Mark Higgins, conocido por su récord en el circuito de la Isla de Man TT, fue el encargado de conducir el coche.
Las pruebas de velocidad máxima se realizaron a la 01:00 de la mañana, para minimizar la interrupción del tráfico local, que fue desviado al otro túnel disponible para evitar demoras. A pesar de la mayor resistencia aerodinámica, el nuevo Continental GT Speed aceleró de 0 a 208 mph (335 km/h) en solo 33 segundos y pudo mantener su velocidad máxima durante el tiempo que el director de la película, Jon Richards, necesitó para completar la filmación.