Para aquellos que prefieren la potencia extrema de Mercedes-Benz en una carrocería deportiva de dos puertas, el cielo ha escuchado sus plegarias. El Mercedes-AMG GT 63 S E Performance ya está aquí, y seguramente va a hacer las delicias de todos los entusiastas del manejo deportivo.
Los que conocen la gama AMG de la marca de la estrella saben que “E Performance” es el término que la compañía utiliza para sus modelos híbridos. El nuevo GT, ahora el buque insignia, ofrece una combinación de 805 caballos de fuerza, gracias a un motor V8 biturbo de 4.0 litros que se combina con un motor eléctrico colocado en la sección trasera.
El motor de gasolina por sí solo genera 603 hp, pero el dato más impresionante es el torque combinado de 1,047 libras-pie. Este paquete motriz es suficiente para catapultar este coupé de 0 a 60 mph en 2.7 segundos, ello, claro, de acuerdo con información de Mercedes-Benz. Con estas cifras, estamos viendo al modelo AMG de producción con la aceleración más rápida de todos los tiempos.
Mercedes-AMG GT 63 S E Performance, pensando para el desempeño
Aunque este vehículo es técnicamente un híbrido enchufable, la eficiencia no es su principal objetivo. La capacidad de la batería es de solo 6.1 kWh, y Mercedes no ha especificado el alcance en modo completamente eléctrico, aunque suponemos que no será mayor de 8 o 10 millas.
En lugar de centrarse en la eficiencia, la batería está diseñada para el rendimiento, y Mercedes-Benz ha hecho lo necesario para que siempre mantenga una temperatura óptima para obtener el máximo de potencia cuando sea necesario. La recarga se realiza mediante un enchufe o a través de diferentes configuraciones de recuperación de energía seleccionables por el conductor, incluyendo un modo de conducción con un solo pedal similar al de un vehículo eléctrico.
La transmisión de doble embrague de nueve velocidades dirige la potencia a través del sistema de tracción total 4Matic+ de Mercedes-AMG. En condiciones normales, el motor eléctrico solo acciona el eje trasero, pero cuando se detecta deslizamiento, la potencia puede ser transferida al eje delantero.
Adicionalmente, el Mercedes-AMG GT 63 S E Performance incluye dirección en el eje trasero y suspensión AMG Active Ride Control con estabilización de balanceo, así como frenos cerámicos de carbono de serie. Las pinzas de seis pistones sujetan discos de 16.5 pulgadas en la parte delantera, ubicados detrás de los rines estándar de 20 pulgadas, mientras que en la parte trasera hay discos de 15 pulgadas con pinzas de un solo pistón. Si quieres algo más espectacular, puedes optar por los rines opcionales de 21 pulgadas.
Solo el ojo avizor podrá distinguir este modelo de la versión E Performance del AMG GT 63 estándar. Mercedes ha añadido un distintivo especial en la tapa del maletero y hay una compuerta que esconde un puerto de carga en la parte trasera. Los cambios en el sistema aerodinámico activo no son visibles a simple vista, pero están diseñados para mejorar el rendimiento del sistema híbrido. Dentro de la cabina 2+2, encontrarás el habitual interior de Mercedes-AMG, lo cual significa que es un lugar cómodo, aunque no muy amplio.
El precio de ese súper bólido será dado a conocer más adelante, cuando su fecha de lanzamiento esté cerca. Eso, según la marca, sucederá a finales de este año.