Pebble Beach Concours d’Elegance 2009: La celebración del vehículo

Pebble Beach Concours d’Elegance 2009: La celebración del vehículo. Desde 1950 los aficionados a los vehículos exóticos, antiguos y los más poco comunes del mundo son invitados a participar en el concurso de vehículos más exclusivo del mundo: El Pebble Beach Concours d’Elegance. Todos los años estos participantes preparan sus vehículos de colección para competir ante un grupo de jurados por los premios más exclusivos de la comunidad automovilística.

Más de 236 vehículos, incluyendo motos por primera vez, han venido procedentes de más de doce países. Los vehículos se exhiben en el hoyo 18 de la famosa cancha de golf de Pebble Beach en la península de Monterey a unas 87 millas al sur de San Francisco y 319 millas al norte de Los Ángeles, California.

Los hombres se pasean con saco por la cancha de golf y las mujeres lucen sombreros lujosos como los que vemos en el Kentucky Derby. Los autos de colección se exhiben divididos por categoría o marca. En el fondo se aprecia una bella vista del Océano Pacifico y la península de Monterey. Cada vehículo tiene una rica historia. Algunos pertenecían a estrellas de cine o dignatarios, pero independientemente de quien fuera el dueño, cada auto es calificado por su originalidad y condición. Por supuesto los vehículos están casi como cuando salieron nuevos o todavía mejor. Los vehículos son sometidos a una restauración completa en la que sólo se pueden usar las partes originales que traían. Por supuesto vienen con todos los documentos de verificación. Los jurados inspeccionan el vehículo en detalle. Estos jurados son generalmente periodistas expertos que califican la marca en que se han especializado. Lo más interesante es que cada vehículo no sólo tiene que estar en su condición original sino también encenderse el motor y cada parte funcionar como debe.

Cada categoría tiene tres ganadores: primero, segundo y tercero, pero el gran premio es otorgado al Best in Show o el mejor de la muestra. Este año se lo llevó un Horch 853 Voll & Ruhrbeck Sport Cabriolet de 1937. Se dice que después de unos años que August Horch trabajó con Karl Benz, decidió ir a producir autos con su propio nombre en 1899. Después dejó su propia compañía para crear en 1909 la empresa que hoy conocemos como Audi. La producción de vehículos Horch continuó sin él y en 1935 la compañía construyó un modelo nuevo con un motor de 5.0 litros y ocho cilindros en línea llamado Horch 850. Esta coche con una carrocería corta fue muy popular entre la clase alta alemana. Sin duda es uno de los más preciosos vistos en esta elegante muestra.

Otros vehículos que vimos que no eran necesariamente de colección sino que estaban en Pebble Beach para su presentación mundial como el nuevo Bentley Mulsanne 2011. También vimos un auto deportivo llamado Devon GTX 2010 que tiene 650 caballos de fuerza y aspira a ser el mejor auto deportivo fabricado en los EE. UU. Por primera vez vi el Porsche Panamera que es el primer sedán de cuatro puertas del fabricante alemán. Infiniti enseñó su concepto llamado Essense que parecía mucho más un Ferrari. Lotus tenía el Evolve, un auto deportivo que promete tener toda la potencia necesaria para la pista manteniendo a la vez eficiencia de gasolina. Uno de los autos que más me llamó la atención fue el Spyker C8 Aileron Spyder producido por una compañía holandesa que parecía salido directamente de una película de ficción. Mercedes-Benz tuvo su McLaren SLR Stirling Moss en exhibición, un auto deportivo que rinde homenaje a los vehículos Silver Arrows de la época de 1934. Es más, Mercedes tuvo en exhibición la colección completa de Silver Arrows con ocho vehículos incluyendo mi favorito, el W196. Cada uno de los vehículos Silver Arrow está evaluado en más de 15 millones de dólares.

Aunque ese precio parezca prohibitivo, no lo es ya que algunos de los vehículos en Pebble Beach están por encima del valor monetario. Aunque éste es un evento sólo para las personas que tienen dinero de sobra, para mí Pebble Beach ha sido más que una exhibición de autos clásicos: una reunión de autos para despertar el amor y pasión que cado uno de nosotros sentimos por ellos.