Cerca del 90 por ciento de las botellas plásticas que se fabrican en el mundo terminan en la basura. La mayoría de nosotros ni siquiera nos tomamos el trabajo de enviarlas al reciclaje. Laura Sinclair, ingeniera de materiales de Ford, se he dedicado a darles una nueva vida. Madre de dos niños, Laura quiere como todos los padres dejarles a sus hijos un legado de un mejor ambiente en planeta. Por eso se emocionó tanto cuando supo que Ford ha decidido reciclar 25 botellas plásticas de agua, de 20 onzas de capacidad, para fabricar los tapetes del piso de cada nuevo Ford Escape. El tapete, fabricado por la firma suiza Autoneum, resiste al desgaste natural del uso diario, aún en los crudos inviernos de Michigan, y también a los rastros inevitables de cereales Cheerios y galletas Goldfish que dejan los niños, incluyendo los de la señora Sinclair. Por ahora, el novedoso tapete ha demostrado que es más durable que las opciones tradicionales. El nuevo Ford Escape, incluyendo su tapete ecológico, debutará en el Auto Show de Los Ángeles.