Mercedes-AMG nos deslumbra con su más reciente creación que es, simplemente espectacular: AMG GT XX Concept.
Se trata de un sedán eléctrico que anticipa la llegada del primer AMG totalmente eléctrico, previsto para 2026. Con una impresionante potencia de 1,340 caballos y una velocidad máxima que alcanza las 224 millas por hora (360 km/h), este modelo apunta a competir con rivales como el Lucid Air Sapphire y el Porsche Taycan Turbo GT.
El diseño del GT XX se compone de líneas aerodinámicas, que se acentúan, gracias al icónico naranja del C111. Destaca su coeficiente aerodinámico de 0.198, cifra notable para un vehículo con rines anchos y espejos exteriores prominentes, casi igualando el récord del Lucid Air, que se sitúa en 0.197.
AMG GT XX Concept: Innovación aerodinámica
Este sobresaliente coeficiente se debe a las cubiertas aerodinámicas en las ruedas, fabricadas con paneles de fibra de carbono que se abren o cierran eléctricamente para optimizar el flujo de aire o enfriar los frenos.
Curiosamente, estas cubiertas no consumen energía de la batería, sino que funcionan gracias a la energía cinética generada por la rotación de las ruedas. Mercedes destaca que su peso apenas supera en un par de kilos al de unas ruedas convencionales.
Interior
El interior del AMG GT XX Concept incluye asientos, hechos de fibra de carbono, que se ajustan con cojines personalizados basados en el escaneo corporal del conductor.
Tanto los textiles del tablero como los de los asientos provienen de neumáticos reciclados de carreras GT3. La cabina se viste completamente en tonos naranjas y cuenta con una iluminación ambiental que realza la atmósfera.
Además, integra una doble pantalla frente al conductor y un volante tipo yugo equipado con selectores y paletas integradas.
Potencia eléctrica y tecnología avanzada
La arquitectura eléctrica del GT XX opera a 800 voltios, sustentada por una batería de última generación capaz de soportar cargas de hasta 850 kW durante gran parte del proceso.
AMG promete que, con solo cinco minutos de carga, el vehículo puede recuperar una autonomía de hasta 249 millas (400 kilómetros). Su tren motriz distribuye la potencia a las cuatro ruedas mediante dos conjuntos con tres motores eléctricos de flujo axial: dos en el eje trasero y uno en el delantero. En conjunto, entregan 1,340 caballos.
El ADN sonoro de AMG
Al arrancar el vehículo, se escucha un rugido que imita el sonido de un motor V8. La firma de la estrella confirmó la presencia de esta sonoridad artificial, considerada por sus propios ejecutivos como “el mejor V8 que hemos creado”. Los altavoces, ubicados en los faros, generan el audio y las carcasas lo amplifican alrededor del automóvil. Además, el volante con paletas y el video promocional sugieren una transmisión virtual similar a la del Hyundai Ioniq 5 N.
Aunque algunos elementos, como la pintura reactiva o las luces traseras LED, podrían no llegar a producción por regulaciones, si AMG integra esta tecnología en sus futuros modelos, tendrá un fuerte impacto en el mercado y pondrá presión a competidores como Lucid y Porsche.
Más allá de las cifras, resulta refrescante que AMG apueste con decisión por un deportivo eléctrico, en lugar de optar por híbridos pesados. La esperanza es que esta transición eléctrica conserve el inconfundible sonido y la emoción del legendario motor V8 que define a la marca.
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