Este Sequoia es un autentico drag car. Toda la vestimenta y energía del vehículo están pensadas para competir en las carreras de un 1/4 milla. De su larga lista de adecuaciones destacan los 650 caballos de fuerza y los neumáticos de 21.5 pulgadas de anchura.
Para lograr una perfecta relación peso-potencia, Toyota eliminó más de 1,500 libras de elementos no esenciales e instaló un hit estético creado a base de fibra de carbono. Como autentico dragster, esta endemoniada station wagon equipa paracaídas para ayudar a detener la tremenda potencia, jaula antivuelco y cinturones de seguridad de cinco puntos, tanto para los asientos delanteros como para las tres filas traseras.