Recientemente MINI presentó al Cooper Coupe, un modelo que es mucho más radical que el resto de la gama, para muchos mejor por ofrecer un mayor espacio de cajuela pero para otros, como un servidor, mucho menos práctico debido a la insuficiencia de espacio en detrás de los asientos de piloto y acompañante.
Pero para todos aquellos que lo consideran una obra de arte, AC Schnitzer decidió llevarlo un poco más lejos con su característico toque. Los expertos de dicha casa están trabajando en el máximo desarrollo del Coupe, con la finalidad de conseguir un manejo equilibrado –sobretodo en curvas cerradas– garantizado por el diferencial de deslizamiento limitado de AC Schnitzer con un bloqueo de hasta 75%. Obviamente cuenta con un silenciador de preparador que permite un mejor flujo para el escape de los gases, planeado para el aumento en potencia; y además mejora la acústica con un tono más grave al rugir la motorización de 1.6 litros. Los frenos son con discos ranurados en la parte delantera y calipers de cuatro pistones, mientras que la suspensión es más rígida y barras estabilizadoras para volver al MINI Coupe un verdadero juguete.
El exterior es mucho menos radical de lo que AC Schnitzer nos tiene acostumbrados, de hecho es algo sobrio y carece de mayores cambios sobre la versión de serie, sobresalen los rines Mi2 pintados de modo bicolor de 18 pulgadas, aunque estará también disponibles con Mi1 en 17 pulgadas y de color plata. Estamos seguros de que esta es sólo una probadita, seguramente el preparador no tarda en sorprendernos con una propuesta mucho más elaborad, por lo pronto habrá que conformarse.