Que mejor manera de culminar la celebración del 50 aniversario de Lamborghini con la aparición de un concepto de nombre Egosita. Diseñado por Walter De Silva este prototipo tiene un carácter único e inusual. Son varios elementos los que se deben mencionar de este deportivo, desde su configuración monoplaza, hasta el estilo y placer de conducción que genera su motor V10 de 5.2 litros con 600 caballos de fuerza.
De hecho la cabina es diseñada como un traje hecho a la medida del conductor. Es una sección desprendible, una vez que se combina con el resto del vehículo, crea una unidad mecánica y aerodinámica perfecta. Para la creación de este vehículo el equipo de diseño de Lamborghini se apoyó en el mundo de la aviación, en particular en el helicóptero Apache, donde la cabina del piloto puede ser expulsado en caso de emergencia.
Del podemos resaltar la arquitectura y los materiales utilizados. Con una imagen corpulenta y futurista, Egoista Concept tiene una estabilidad y aerodinámica nacida a partir de una serie de elementos que además de generar un mejor flujo de aire mantiene una optima refrigeración al V10. Al estar fabricado de materiales ligeros como aluminio y fibra de carbono, el vehículo dispone de zonas donde está prohibido estar de pie, debidamente marcados como en los aviones. Aunque las semejanzas con el mundo de la aeronáutica no terminan, ya que el cuerpo está hecho de un material especial antirradar, y el cristal es anti-reflejos con una gradación de color naranja.
En el interior de la cabina es muy racional, su funcionalidad llevado al extremo. Hay un asiento de carreras con un cinturón de seguridad de cuatro puntos, cada tira de un color diferente, bolsas de aire, y el mínimo de instrumentos. Para salir del vehículo, el conductor debe quitar el volante y descansar en el tablero, abra el domo con un mando electrónico para salir de pie en su asiento y luego sentarse en un punto preciso de la carrocería, luego, girar sus piernas 180 grados desde el interior de la cabina al exterior del vehículo.