El Volkswagen Taos es 9.3 pulgadas más corto que el Tiguan y promete excelente relación costo-beneficio, mucho espacio interior y novedosos avances tecnológicos.
El completamente nuevo Volkswagen Taos llega al portafolio de la marca alemana para ubicarse, en cuanto a tamaño se refiere, por debajo del Tiguan y del también nuevo ID.4 EV.
Este nuevo SUV viene montado sobre la plataforma modular versátil de la compañía, conocida por la sigla MQB, pero ha sido afinado expresamente para el mercado regional, por ingenieros de la región norteamericana.
De hecho, tuvimos la increíble oportunidad de manejarlo justo en los terrenos de pruebas de Volkswagen en Maricopa, Arizona, cerca de la ciudad de Phoenix.
Volkswagen Taos sometido a pruebas muy rigurosas
Especial atención mereció el desarrollo del chasís del nuevo Taos, que estuvo a cargo de un equipo de 55 ingenieros de Puebla, México, que trabajaron de la mano con colegas suyos de Alemania y de los Estados Unidos, que tuvieron en cuenta las desafiantes condiciones de calles y carreteras en los tres países de la región norteamericana.
De las rutas asfaltadas del sur de los Estados Unidos, que alcanzan altas temperaturas en el verano, a las agrietadas por los terremotos en California y las que reciben la crudeza del invierno y son castigadas año tras año por toneladas de sal, la suspensión del Taos tenía que estar preparada para enfrentarlas todas.
Motor
Al Volkswagen Taos lo impulsa un motor de combustión interna a gasolina, de 4 cilindros en línea con 1.5 litros de desplazamiento y aspiración turboalimentada, que entrega 158 hp y 184 lb-pie de torsión. La transmisión estándar es automática, de ocho velocidades.
Estará en los concesionarios en junio y llega a competir en el segmento más poblado del mercado automotriz americano, el de los crossovers, responsable por la venta de más de 4 millones de unidades en el 2019, equivalentes al 24 por ciento del mercado.