Agarrar las llaves del último Lotus Elise construido para un cliente se sentiría muy especial para cualquiera de nosotros. Pero el caso de Elisa Artioli es especialmente diferente, si su nombre es una pista, ya lo habrás descifrado.
La historia de Elisa y Elise
El abuelo de Elisa, Romano Artioli, era jefe de Lotus cuando se concibió el legendario auto deportivo ligero y lo nombró en su honor. La italiana de 29 años, tenía solo dos años cuando se presentó la primera generación en el Salón del Automóvil de Frankfurt de 1995. Un dato curioso es que desde los cuatro años, es dueña de un S1.
Pero ahora es la orgullosa propietaria del último Lotus Elise para clientes, un Sport 240 Final Edition. Ésta es la encarnación final del deportivo que completa una historia de 25 años. El Elise número 35,124 y último fue un deportivo amarillo 240 producido en diciembre de 2021 y destinado a la colección de herencia de Lotus.
Pintado en Championship Gold, su 240 está propulsado por un motor Toyota de cuatro cilindros y 1.8 litros sobrealimentado. Con 237 hp, esto es poco más del doble de la potencia del S1 original de Artioli. Lotus dice que de cero a 60 mph (96 km/h) toma 4.1 segundos y da una velocidad máxima de 147 mph (237 km/h). En comparación con alrededor de 6 segundos y 126 mph (203 km/h) para el original con motor Rover de aspiración natural.
El Elise Sport 240 orientado a la carretera y su Elise Cup 250 más centrado en la pista marcaron la despedida del modelo. Opciones de pintura únicas, calcomanías exteriores a medida y nuevos acabados de rines, los distinguen del resto.
En el interior, tiene un paquete de instrumentos TFT digital, una placa de construcción, un asiento nuevo y un volante de parte inferior plana. El 240 sport también ganó 20 hp sobre el 220 Sport al que efectivamente reemplazó en la gama.
Lotus también ofreció a los clientes la oportunidad de reducir el peso en vacío de su automóvil de 922 kg (2,033 lb) a solo 898 kg (1,980 lb). La técnica era el uso de paneles de carbono, una batería de iones de litio y una ventana trasera de policarbonato liviano.
Entusiasta de los autos
Artioli regresó a Italia desde la base de Lotus en Norfolk, Inglaterra, cuando tenía cinco años. Ahora es arquitecta capacitada pero también viaja por carretera a través de Europa central y a lugares como la fábrica de Bugatti en desuso. Su abuelo también estuvo en la construcción de dicha fábrica en la década de 1990 para construir el EB110. Si te apetece acompañarla este verano, dirígete a DelightfulDriving.com.
Pero si estás deseando que llegue la próxima Elise, te enfrentas a una larga espera. Lotus está planeando un auto deportivo totalmente eléctrico para tomar el relevo donde lo dejó el Elise, pero no estará listo antes de 2026
