Hace setenta años, el 13 de septiembre de 1953, en el Gran Premio de Italia, Juan Manuel Fangio celebró su primera y única victoria de la temporada en la carrera final en Monza, al volante de su Maserati A6GCM. Han transcurrido siete décadas desde ese memorable evento.
Este destacado piloto argentino, considerado uno de los más grandes de todos los tiempos junto a figuras de la talla de Senna y Schumacher, cedió el título de piloto de Fórmula 1 más laureado a este último después de casi 50 años. Fangio llevó a la marca del Tridente a lo alto de la cúspide en la máxima categoría del automovilismo en 1954 y 1957, este último año marcando su quinto y último campeonato mundial.
Siete décadas atrás, en el circuito de Brianza, el campeón mundial argentino hizo historia. A partir de esa victoria, Fangio lograría su segundo título mundial al año siguiente.
Siete décadas del legendario triunfo de Juan Manuel Fangio
Este aniversario es un hito digno de recordar para Maserati, en un año en el que la marca ha recuperado su prestigio en los anales del automovilismo internacional. Esto se debe a la importancia de su regreso al mundo del automovilismo deportivo.
Después de su primer año en la Fórmula E, donde Maserati obtuvo tres podios y una victoria, la marca con sede en Modena anunció su regreso a la categoría GT. Al mismo tiempo, la marca también reveló el MCXtrema, cuyas únicas 62 unidades serán destinadas al circuito.
Desde su debut en el mundo de las carreras, allá por 1926, cuando Alfieri Maserati se adjudicó el primer lugar en su clase en la Targa Florio a bordo de un Type 26, el automovilismo deportivo ha sido parte del ADN de la marca.