En el SEMA Show 2024, Ringbrothers no solo deslumbró con el Blazer K5 “Tuka”, sino que también presentó una reinterpretación radical de un clásico americano: el Invadr, un Buick Grand National de 1987 llevado a un nivel de potencia y refinamiento inimaginable.
Este proyecto, que demandó 5,000 horas de trabajo meticuloso, conserva la esencia del diseño original del Grand National, pero con una serie de modificaciones que lo transforman en una máquina de alto rendimiento.
Las defensas, ahora fabricadas en acero inoxidable con detalles en aluminio mecanizado, realzan su presencia imponente. Las salpicaderas delanteras se ajustaron para una mejor integración, mientras que los estribos alargados aportan fluidez a la silueta.
El capó, aunque conserva su forma original, incorpora una entrada de aire en fibra de carbono que no solo optimiza la ventilación del motor, sino que también añade un toque de agresividad.
El motor del Invadr
Bajo el capó, el Invadr alberga un corazón brutal: un motor V6 de 3.8 litros, obra de Duttweiler Performance, con un potencial que alcanza los 2,000 caballos de fuerza. Para su uso diario, se configuró con turbos gemelos Precision de 62 mm que, con una presión de 32 libras, entregan la impresionante cifra de 1,246 caballos de fuerza utilizando combustible E85.
Este propulsor, construido con componentes de alta gama, como un bloque de aluminio con soportes de seis pernos, cabezas de cilindro artesanales y un cigüeñal de Bryant Racing, se combina con una transmisión manual Bowler Tremec T-56 Magnum de seis velocidades y un eje de fibra de carbono, garantizando una experiencia de conducción emocionante.
La potencia del Invadr se complementa con un chasis a medida de Roadster Shop y una suspensión trasera de cuatro enlaces con amortiguadores Penske ajustables.
Frenos Brembo con pinzas de seis pistones y discos carbono-cerámicos se encargan de detener esta bestia, mientras que los rines HRE de 19 y 20 pulgadas, calzados con neumáticos Michelin Pilot Sport Cup 2, aseguran un agarre excepcional. Para mayor practicidad, se incorporó un sistema de suspensión de aire que eleva el coche para facilitar el cambio de neumáticos.
Interior
El interior del Invadr es una combinación de lujo y deportividad. La tapicería, a cargo de Upholstery Unlimited, es una obra de arte, mientras que los instrumentos de Dakota Digital añaden un toque moderno. Los paneles del piso rediseñados mejoran la comodidad, y el volante de fibra de carbono de Ringbrothers completa la atmósfera sofisticada.
El Invadr es, al igual que otros modelos que hemos conocido, un testimonio de la maestría de Ringbrothers, una reinterpretación moderna de un ícono americano que combina potencia bruta, tecnología de vanguardia y un diseño que cautiva.