Muchos hiperdeportivos ultra raros terminan guardados en colecciones privadas, sin tocar el asfalto para el que fueron creados. Pero ese no es el caso de al menos uno de los cinco Pagani Zonda Revolución. Recientemente, un ejemplar con carrocería de fibra de carbono azul se llevó al Circuito de las Américas, donde demostró su poder al recorrer las rectas a gran velocidad y tomar curvas con precisión.
Rendimiento único
Bajo el cofre, el Zonda Revolución cuenta con un motor V12 de 6.0 litros, desarrollado por AMG, que genera 800 hp y 538 lb-pie de torque. Sin restricciones en el escape, este motor produce un sonido inconfundible, acompañado por el característico zumbido de su caja de cambios secuencial de seis velocidades.
En pista, este auto es una máquina de fuerza bruta y refinamiento. En la recta trasera del circuito, alcanzó los 178 mph (287 km/h) antes de frenar con precisión. También se mantuvo estable en curvas de alta velocidad a más de 93 mph (150 km/h), demostrando que no solo es rápido en línea recta, sino que también tiene un diseño aerodinámico y una carga aerodinámica efectiva.
Pagani Zonda Revolución, diseñado para dominar el circuito
Pagani se encargó que cada detalle del Zonda Revolución esté enfocado en maximizar su desempeño. Su aerodinámica avanzada, con un gran alerón trasero y tecnología de gestión de carga aerodinámica, proporciona estabilidad incluso a altas velocidades. Su carrocería de fibra de carbono reduce el peso sin comprometer la rigidez estructural, lo que se traduce en una experiencia de conducción extrema.
Una pieza exclusiva en la historia del automovilismo
Solo existen cinco unidades del Pagani Zonda Revolución en el mundo, lo que lo convierte en uno de los hiperdeportivos más exclusivos. El ejemplar con acabado en fibra de carbono azul, recientemente visto en el Circuito de las Américas, estuvo en venta en Japón en 2021. Si volviera a cambiar de dueño, su precio podría superar los $10 millones de dólares, considerando el aumento en el valor de los Zonda raros.
A pesar de su exclusividad, el propietario de este Revolución no duda en llevarlo al límite en la pista. En lugar de estar guardado en un museo o en un garaje privado, este auto sigue cumpliendo su propósito original: ofrecer una experiencia de manejo sin comparación.
