El nuevo smart Fortwo deberá garantizar su rentabilidad, antes de iniciar su fabricación

La legendaria empresa constructora de utilitarios está cada vez más cerca de aprobar el desarrollo y construcción del sucesor del Fortwo, sin embargo, antes de dar luz verde, primero quiere garantizar que el nuevo modelo será rentable.

De acuerdo con una nota publicada por Carscoops, la producción del antiguo Fortwo eléctrico finalizó hace unos meses, y el CEO de Smart, Dirk Adelmann, confirmó recientemente que se está trabajando en su reemplazo. El ejecutivo afirma que hay bases comerciales firmes, sobre todo en Europa, para seguir adelante con el proyecto.

En otra nota, publicada por Autocar, se afirma que Adelmann comentó que: “Estamos trabajando en ello. La producción del actual Fortwo terminó hace dos meses. Hubiera sido ideal tener un sucesor directo, pero no lo tenemos. Sin embargo, estamos en ello”.

La nota afirma que, de llevarse adelante el ‘Proyecto 2’ como se le conoce internamente, el auto podría recibir el nombre de #2, lo cual no deja de ser curioso dado que, como sabemos, smart ya fabrica un crossover eléctrico llamado #1, que es mucho más grande que cualquier sucesor del Fortwo. Sin embargo, Adelmann mencionó que el nombre #2 se ha reservado para un nuevo modelo compacto, describiéndolo como un “número emblemático” para la marca.

El nuevo smart Fortwo podría ver la luz pronto

No obstante, la elección del nombre es el menor de los problemas para el fabricante, quien primero debe garantizar que el proyecto sea rentable, sobre todo considerando que no se venderá en grandes volúmenes. El ejecutivo afirmó que la marca no puede justificar el desarrollo de una nueva plataforma por sí sola y está buscando socios con los que pueda compartir la arquitectura.

“Si compartes esta plataforma con socios - aún estamos evaluándolo - puedes compartir los costos de inversión y el sitio de producción, y empieza a tener sentido”, explicó. “Lo último que queremos es producir un vehículo que no sea rentable, porque no durará mucho. Queremos un caso de negocio positivo para nosotros, para nuestros distribuidores y, en última instancia, para nuestros clientes”.

Probablemente, el socio más lógico para smart en este proyecto sería Geely, el conglomerado chino que posee el 50% de la marca alemana y que, además, es dueña de otras marcas automotrices que no solo se venden en China, sino también en Europa.