La familia Volkswagen ID, cuyo primer modelo saldrá de las líneas de producción de la Planta de Zwickau a finales de año, será el primero del Grupo Volkswagen con impacto neutral ecológico a lo largo de todo su ciclo de vida, siempre y cuando sus conductores recarguen las batearías con energía renovable.
Los ingenieros y diseñadores de Volkswagen trabajaron intensamente para asegurarse de toda su cadena de valor de la familia ID reduzca a cero CO2.
Para logarlo, las baterías se producirán en Europa y la energía vendrá de fuentes sostenibles. Además, con la ayuda de proveedores directos e indirectos, se están estudiando más ahorros potenciales en la cadena de suministros que se extienden hasta la producción de materias primas.
La planta de la Planta Volkswagen Zwickau ya está usando energía producida externamente por fuentes sostenibles.
Las emisiones inevitables generadas por el proceso de fabricación se verán compensadas por las inversiones en proyectos medioambientales certificados. De esta manera, desde el principio la fabricación del Volkswagen ID será neutra desde el punto de vista del CO2.
Para la recarga, Volkswagen recomienda el uso de energía producida por fuentes renovables, como la energía eólica o la energía hidráulica.
La nueva filial de Volkswagen, Elli, empezó hace poco a ofrecer electricidad producida de forma regenerativa llamada Volkswagen Naturstrom.
La red de carga rápida IONITY, creada por Volkswagen y otros fabricantes, ofrecerá energía verde en cerca de 400 puntos de carga de autopistas europeas - donde haya disponibilidad.
Familia Volkswagen ID, el auto de la revolución verde
Con estas iniciativas, Volkswagen ya le dio la bienvenida a la transformación energética de Alemania, y ampliará su filosofía alrededor del mundo a medida que se hagan presentes los recursos y posibilidades de infraestructura, para que sus autos eléctricos sean 100% limpios.
Un factor vital en ese objetivo es que también lo sea la energía empleada para producirlos y cargarlos, por lo que Volkswagen apoya abiertamente la transición energética a fuentes de energía renovables planeada por Alemania.
Incluso más allá de la transformación de la energía, el gran paso hacia delante de la movilidad eléctrica solo podrá darse desde una alianza con los líderes políticos.
Desde la legislación de propiedad residencial hasta la expansión de la infraestructura de carga, el objetivo debería ser retirar lo antes posible las barreras que hoy obstaculizan el camino de los coches eléctricos.
Volkswagen quiere hacer coches eléctricos atractivos y asequibles para tantas personas como sea posible.
El compacto Volkswagen ID. saldrá de la cadena de montaje de Zwickau a partir de finales de 2019. El SUV ID. CROZZ, el ID. BUZZ y el sedán ID. VIZZION, seguirán sus pasos poco después.
Por si sola, la marca Volkswagen tiene previsto invertir 9,000 millones de euros en movilidad eléctrica hasta 2023.
“La movilidad verdaderamente sostenible es factible si todos la deseamos y trabajamos en ella”, dijo Thomas Ulbrich, miembro del Comité Ejecutivo de Volkswagen.
En lo que respecta a la fase de fabricación por si sola, la huella de carbono del Volswgagen ID se reducirá en más de 1 millón de toneladas de CO2 al año.
Esto equivale al impacto climático de una central termoeléctrica de carbón con capacidad de suministro eléctrico para 300,000 hogares.
Además, Volkswagen está trabajando en un programa de descarbonización que incluye medidas para otros modelos. La marca ofrecerá más de 20 modelos totalmente eléctricos de aquí a 2025.