De acuerdo con la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA), las muertes de peatones en accidentes de vehículos han subido un 33% en las últimas dos décadas. En contraparte, las muertes de ocupantes de automóviles han disminuido, lo que ha llevado a este organismo a tomar medidas al respecto.
La NHTSA propone una normativa que establece nuevos estándares de seguridad para reducir las lesiones en la cabeza de peatones en choques frontales, algo que podría plantear desafíos para las camionetas pickup y los SUV, que han crecido en tamaño.
Aunque la norma no se refiere a diseños de vehículos específicos, sí destaca “prácticamente todo el segmento de camionetas pickup y grandes SUV” en los Estados Unidos. De hecho, se centra particularmente en los diseños de los capós, aunque en vehículos de mayor tamaño también podría tomar en cuenta parrillas y frontales.
Esta normativa exigiría que los vehículos cumplan con ciertos criterios relacionados con el impacto en los laterales de los peatones, ya que la mayoría de los atropellamientos ocurren cuando una persona cruza frente a un vehículo. Las pruebas incluirían simulaciones con dos tamaños de cabeza: uno que representa a un niño de seis años y otro a un adulto.
El extenso documento de 238 páginas contiene pautas y sugerencias sobre cómo estructurar los capós y salpicaderas, y define parámetros sobre cómo un peatón podría impactar en estas áreas. El objetivo principal es que estos componentes absorban mejor la fuerza del impacto en la cabeza del peatón para mejorar la supervivencia en caso de colisiones.
La NHTSA está alarmada por el aumento de atropellamientos
“Estamos enfrentando una crisis de muertes en nuestras carreteras, y los usuarios más vulnerables, como los peatones, son quienes más sufren”, expresó Sophie Shulman, Administradora Adjunta de la NHTSA. “Entre 2013 y 2022, las fatalidades entre peatones aumentaron en un 57%, pasando de 4,779 a 7,522. Con esta norma, aseguraremos que los vehículos sean diseñados para proteger tanto a sus ocupantes como a los peatones de lesiones graves o fatales. Continuaremos trabajando para mejorar la seguridad vial para todos y proteger a los usuarios más vulnerables".
En los últimos años, se ha puesto el foco en las camionetas y SUV debido a sus frentes grandes, los cuales no solo aumentan el daño a los peatones en caso de accidentes, sino que también limitan la visibilidad del conductor.
El año pasado, el Instituto de Seguros para la Seguridad en las Carreteras (IIHS) concluyó que los vehículos con frentes elevados suponen un mayor riesgo para los peatones, pero este problema no se limita a las camionetas grandes. El informe también señala riesgos en vehículos medianos con diseños frontales planos y contundentes, que también incrementan el peligro. Este tipo de diseños es cada vez más común.
La propuesta está en proceso de evaluación y se encuentra actualmente en un período de comentarios públicos de 60 días.